El Portus Apostoli apeló a la épica para superar al Benavente

Jose Manuel Jamardo Castro
j. m. jamardo RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Rangel anotó el gol de la victoria a dos minutos del pitido final

16 ene 2021 . Actualizado a las 22:32 h.

Los espectadores que acudieron al polideportivo Agustín Mourís sufrieron de lo lindo en un partido trepidante y con alternativas en el marcador, pero el sufrimiento mereció la pena. Los jugadores de Marlon Velasco tuvieron que recurrir a la épica para superar a un buen Benavente, que por algo es el segundo clasificado de la Segunda División Nacional de fútbol sala. Con empeño lograron superarlo en el último tramo del choque por 4-3. La victoria sigue manteniendo a los noieses en lo más alto de la tabla clasificatoria, con 28 puntos en su casillero tras diez jornadas. El equipo continúa imbatido, con nueve triunfos y un empate.

Nuevamente, el público le dio una marcha más al conjunto local con su apoyo durante los 40 minutos. En ningún momento dejaron de creer en la victoria y llevaron a sus jugadores en volandas hasta el triunfo final.

El choque comenzó bastante nivelado y con los dos equipos buscando la portería rival. Los de Marlon Velasco miraban con más ahínco al guardameta visitante, pero no fue hasta el minuto 14 cuando inauguraron el electrónico con un tanto de Lluc. El Benavente también buscaba el gol. A falta de dos minutos del descanso, Melaguti, que posteriormente fue expulsado, ponía las tablas en el marcador.

La primera mitad fue bastante igualada, aunque con más ocasiones de materializar para los jugadores del equipo noiés.

La segunda parte arrancó de la misma manera, con los dos equipos buscando desnivelar el marcador. Sin embargo, fueron los visitantes los que golpearon, y por partida doble. En el minuto 22, Novoa enviaba el balón a la red. Este mismo jugador aprovechaba la siguiente acción para anotar el tercero.

Carrusel de ocasiones

El elenco de Marlon Velasco se fue hacia arriba con el firme propósito de acortar diferencias. Apretó a su rival y comenzó a crear un auténtico carrusel de ocasiones. Fue en el minuto 32 cuando Pirata anotaba el 2-3. Con ocho minutos todavía por delante, los jugadores y el público creían en la remontada. Pope provocaba el delirio de la bancada al empatar en el 34. A dos minutos del final, Rangel conseguía darle la vuelta al marcador y anotar el 4-3 definitivo.

Quedaban dos minutos y los jugadores del Benavente se fueron arriba en busca del gol que por lo menos le diese un punto. Estuvieron cerca de conseguirlo, porque mandaron un balón a la madera a escasos segundos del pitido final. Finalmente el Noia se hizo con tres puntos muy trabajados en un partido bonito y disputado. Al terminar hubo una pequeña tangana que no tuvo mayores consecuencias.