Tras la independencia del país, algunos barcos siguieron faenando en la zona sin permiso
17 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Entre aplausos y llantos eran recibidos, hace 30 años, un centenar de marineros que llegaban al aeropuerto de Lavacolla después de un viaje de casi 30 horas. Procedían de Namibia, donde llevaban casi un mes retenidos. Casi todos eran pescadores de las zonas de Vigo y Barbanza. Su liberación estuvo precedida de un arduo proceso diplomático, en el que entraron en juego tanto el gobierno autonómico como el estatal.
El origen del conflicto se remontaba a febrero de 1990, cuando Namibia, que era entonces la última colonia africana, conseguía la independencia. Algunos barcos que habitualmente faenaban en sus costas alcanzaron acuerdos privados con las autoridades, pero otros continuaron trabajando en la zona de forma ilegal, lo que dio lugar al apresamiento de cinco buques en noviembre.
A su llegada al aeropuerto compostelano, un boirense explicaba que las detenciones se habían producido sin incidentes importantes y que habían recibido un trato correcto durante el tiempo que había permanecido apresados, si bien es cierto que admitía que las comunicaciones con Galicia habían sido complicadas.
Algunos pescadores aseguraban que habían sido engañados para permanecer en Namibia, mientras que otros reconocían ser conscientes de que estaban trabajando de forma ilegal. El 22 de diciembre llegaban a Vigo otra veintena de marineros y eran recibidos con cava. Algunos tuvieron que pasar las Navidades en Namibia.