Muchas flores pero pocos visitantes en los cementerios de Barbanza

Ana Lorenzo Fernández
ana lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Las restricciones por el covid y el mal tiempo vaciaron los camposantos

02 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

«Que se acabe este ano dunha vez». Eso pedía ayer una vecina de A Pobra a las puertas del cementerio de O Caramiñal, donde lamentaba que el coronavirus no solo se hubiese llevado a miles de personas antes de tiempo, sino que ahora tampoco permitía que se les honrasen en el día de Todos los Santos. Aunque las flores no faltaron, la llegada de visitantes a la mayoría de los camposantos fue a cuentagotas durante toda la jornada, y en gran parte de estos recintos se contaban con los dedos de una mano las personas que acudían cada hora, una situación derivada en gran parte por las medidas anticovid y por el mal tiempo que no ayudó a que los barbanzanos salieran de sus casas.

«Desde o mércores xa veu moita xente a deixar as flores, onte tamén houbo moitas persoas, e outras non puideron achegarse porque pecharon as cidades», apuntaba un vecino de Palmeira como posibles causas de la escasa afluencia a estos recintos. El cementerio de esta parroquia ribeirense, así como el de la capital barbanzana, fueron dos de los que registraron más movimiento, aunque siempre cumpliendo las medidas de seguridad y distanciamiento, y atravesando los arcos especiales de vigilancia que instaló el Concello.

También en el de camposanto de Nebra, en Porto do Son, se juntaron un buen número de personas a la hora de la misa del mediodía, pero según apuntaron desde la Policía Local, la instalación de altavoces permitió que muchos feligreses pudieran seguir la ceremonia religiosa desde el exterior de la capilla. Aunque guardaron la correspondiente separación, no se libraron de tener que estar bajo la lluvia.

En Rianxo, Outes o Noia tampoco hubo problemas para controlar los aforos en los cementerios parroquiales, puesto que apenas hubo visitantes durante toda la jornada. Menos mal que las flores no faltaron y ayudaron a que la imagen de los camposantos no fuera tan desoladora en esta época covid.