Los Presupuestos estatales olvidan cinco millones comprometidos en Barbanza

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Demandas históricas como el dragado de la ría noiesa siguen sin figurar

30 oct 2020 . Actualizado a las 15:00 h.

Ninguna inversión nueva para la comarca aparece recogida de manera específica en los presupuestos del Estado para el próximo ejercicio, y eso que hay demandas por importe de unos cinco millones de euros que han adquirido ya la categoría de añejas por el tiempo que llevan aguardando su materialización. Como alternativa a ese vacío absoluto en las partidas detalladas, a los concellos les queda la opción de rascar algo en las genéricas.

La batalla del alcalde de Noia, Santiago Freire, será lograr el dragado de la ría: «Polo menos os 25 metros do malecón de Gasset que figuran na declaración de impacto ambiental». La intervención de la que habla es una pequeña parte de lo necesario para retirar los lodos de la ría, pero Freire es realista: «Queremos a actuación completa, pero tal e como están as cousas é preferible ir pouco a pouco». Incluso, reconoce que ahora su prioridad es que prosiga la reforma de la fachada marítima, sufragada por el Estado con un millón de euros.

Lo cierto es que a ningún dirigente local ha pillado por sorpresa la falta de inversiones en la comarca, algo que afirman que veían venir «ante a situación actual». Los proyectos pendientes afectan al área administrada por Costas y, en su mayoría, consisten en la regeneración de fachadas marítimas o construcción de nuevas sendas peatonales.

El regidor ribeirense, Manuel Ruiz, una vez conseguida la ansiada nueva comisaría, apunta que sería interesante materializar la comprometida remodelación del paseo marítimo de A Corna. Se trata de una actuación menor cuyo coste cifra en unos 300.000 euros.

Senda peatonal

Un poco más elevada, cerca del millón de euros, es la reclamada en Porto do Son. Se trata de una senda peatonal, entre la villa y el instituto, por la que el regidor, Luis Oujo, manifiesta que continuará peleando. Sin embargo, también ha gestionado con Costas otra importante intervención que tiene mayor prioridad. Es el traslado del colegio de Portosín, un proyecto a tres bandas en el que intervienen Xunta, Concello y Estado: «O compromiso é que Costas asuma a demolición do edificio».

Lo cierto es que Luis Oujo tenía pocas esperanzas de que figurase en los presupuestos, pero anticipa: «Nos do vindeiro exercicio debería aparecer».

Tampoco renuncia el rianxeiro Adolfo Muíños a la regeneración de los acantilados entre Punta Fincheira y Tanxil, una mejora tan longeva como el dragado de la ría en Noia. Sin embargo, Muíños da un paso más y comenta que su objetivo es arrancar de las partidas genéricas una pequeña inversión, que cifra en algo más de 100.000 euros, para la musealización de la casa de Rafael Dieste.

Nada ha vuelto a saberse de la segunda fase del proyecto de la marisma pobrense de As Xunqueiras, que afecta al barrio de Os Cataláns. La inversión era de 1,3 millones de euros, una cuantía que seguramente ha cambiado por el tiempo transcurrido y porque sigue sin clarificarse si Costas derribará o no las antiguas instalaciones fabriles.

Ampliación viaria

A dos millones asciende, según el estudio realizado hace varios años, el plan de ampliación de la vía que conecta la localidad carnotana de O Pindo con O Ézaro, en el municipio de Dumbría. Es una compleja mejora de la seguridad vial, para que los peatones que cruzan por el puente dispongan de un paso alternativo, explica el regidor de Carnota, Juan Manuel Saborido, que abordó su materialización con responsables del departamento de Costas en Galicia, pero nada figura en las cuentas del Estado dadas a conocer el pasado miércoles.

Tampoco Saborido se muestra sorprendido por esta ausencia porque, precisa, «a situación é complicada neste momento». En las negociaciones previas, con el propósito de conseguir que el Gobierno central aflojase el bolsillo, el alcalde carnotano reconoce que «enfocamos a demanda pola mellora da seguridade viaria». Toca seguir aguardando.

Por su parte, el teniente de alcalde boirense Luis Ruiz explica que, aparte de los proyectos pendientes, no se formularon nuevas propuestas. La adecuación de la fachada marítima de Cabo de Cruz constituye una de ellas.