El coronavirus adelanta Difuntos

Marta Gómez Regenjo
Marta Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Floristerías de la comarca advierten de que este año habrá escasez de flor y han anticipado el plazo para realizar los encargos prácticamente un mes

08 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Faltan más de tres semanas, pero mirando las publicaciones y cartelería colgada en muchas floristerías de la comarca cualquiera diría que este año la festividad de Todos los Santos y Difuntos se ha adelantado por obra y gracia, cómo no, del coronavirus. Y es que la escasez de flor de la que advierten sus proveedores ha llevado a muchos negocios a anticipar el plazo para la recogida de los encargos que luego lucirán en los cementerios barbanzanos.

La noiesa Sandra Cierto, de El Jardín, recogerá pedidos para Difuntos hasta este sábado: «Outros anos collemos encargas ata un par de días antes, pero este ano non me arrisco, vou traballar co que teño». Uno de los problemas es que buena parte de las flores con las que se confeccionan centros y ramos proceden de Colombia, y con el tráfico aéreo muy mermado, los proveedores necesitan tener prevista la demanda. A ello se suma que muchos productores no han plantado para esta temporada, o lo han hecho en menor cantidad porque «na campaña do Día do Pai, que para nós tamén é un ha data forte, tirouse moita flor».

En aquel momento, el confinamiento echó por tierra las ventas, y es precisamente la incertidumbre que reina debido a la pandemia la que lleva a los floristas a plantear la campaña de Difuntos con cautela. Ramona Pego está al frente de Mandrágora y, aunque en su caso afirma que las semanas previas al 1 de noviembre están transcurriendo con relativa normalidad, no oculta su temor: «Este ano hai moitas dúbidas polo covid. A min polo de agora ningún provedor me dixo que non vaian ter flor, pero se as circunstancias cambian, cambia todo, así que o tomamos con precaución e con desconfianza porque non se sabe que vai pasar».

Sin embargo, en la rianxeira La Rosa también esperan escasez de flor: «Case toda vén de Colombia e vai vir moi cara. Este ano co confinamento estivo todo cerrado a que se plantou non floreceu para que haxa tanta coma outros anos». Aunque en esta época la mayoría de las floristerías amplían su horario de trabajo para atender la elevada demanda de pedidos, aseguran que este año habrá negocios que ni siquiera abran. «Hai unha incerteza tremenda e moita xente non sabe como vai facer», añadían.

Evitar aglomeraciones

La incertidumbre es algo que experimenta el sector en su conjunto, igual que la preocupación para evitar que en los establecimientos se produzcan aglomeraciones. Para evitar la acumulación de clientes en las floristerías, la mayoría solo atenderá encargos, de manera que aquellos que a última hora se encuentren con que no tienen flores para llevar al cementerio lo tendrán complicado para conseguirlas. «Flor solta a maiores das encargas non vai haber», explicaba Sandra Cierto, que añadía una nueva cuestión, las concentraciones en los camposantos: «Nós sempre temos servizo de entrega no cemiterio, pero este ano temos máis demanda porque hai moita xente maior que ten medo».

En otra floristería explicaban que este año también se está adelantando la fecha de recogida de los centros en lugar de esperar a la víspera para evitar, precisamente, encontrarse con demasiada gente en los cementerios.

Incluso los propios profesionales del sector muestran su temor a posibles contagios, y tomarán medidas como dar hora para la recogida de los encargos con el fin de evitar que se congreguen demasiadas personas en los establecimientos. «Temos sempre un horario máis amplo, e como só traballamos con encargos a xente recolle e marcha. Aínda que este ano terán que esperar fóra, esperemos que o tempo axude», explicaba Ramona Pego.

En La Rosa, trabajarán a puerta cerrada y fijarán con los clientes una hora para la recogida. Todo para que el día de Todos los Santos se viva «dentro da normalidade que temos agora».