El berberecho más caro llegó a los 19 euros en el regreso de los mariscadores de Noia a los arenales

La Voz RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

Los productores capturaron más de 29 toneladas de bivalvo en la primera jornada de trabajo tras el cierre por toxina

02 oct 2020 . Actualizado a las 14:06 h.

El bullicio regresó ayer a las playas noiesas después de que la Consellería do Mar levantase la prohibición de faenar al bajar de forma considerable los niveles de toxina. En la jornada de ayer se extrajeron algo más de 29 toneladas de marisco y los precios fueron similares a las jornadas de la pasada semana. El berberecho de primera llegó hasta los 19,80 euros el kilo, mientras que la almeja fina se quedó en 48 euros. Por su parte, la babosa más cara cotizó a 18,50 euros y la japónica, la más abundante, a 9,50. El total de las ventas realizadas en las lonjas de Testal y O Freixo dejó una facturación de 166.000 euros.

Volver a la normalidad era la prioridad de las productoras de a pie, según comentó su presidenta, Marisol Amado. La responsable del colectivo destacó que la mayoría de las profesionales que bajaron ayer a los arenales «colleu os topes». Aunque solo estuvieron tres días paradas, indica que: «Dá a impresión de que o berberecho está un pouco máis gordo». Una de las mayores preocupaciones de las mariscadoras es que la toxina vuelva a entrar en la ría y haya que parar, más aún con el aviso de temporal.

El mariscador de a flote Benito Martínez es todo un veterano trabajando en estas aguas. Comentó que lleva más de 40 años participando en las campañas marisqueras y reconocía que esta no es de las mejores. Sobre la jornada de ayer, destacó que tanto él como su compañero cogieron el tope de berberecho, 20 kilos por persona, pero «custounos moito traballo e houbo unha grande cantidade de xente que non foi capaz de facelo». Señaló que la mayoría del marisco es de segunda y tercera: «Hai que escollelo moito e en dúas horas e media que temos é difícil».

Martínez no está de acuerdo con que no se abriera la zona de A Misela. Al respecto dijo: «O mellor berberecho sempre estivo na parte de abaixo, está máis cheo. Aínda que sexa pequeno, debeuse abrir esa zona porque na de arriba non está tan bo e por iso se paga menos».

Pregunta del BNG

Por otra parte, el BNG registró una iniciativa en el Parlamento gallego relacionada con los análisis de las aguas que realiza el Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar) con la finalidad de terminar si hay toxina. La barbanzana Rosana Pérez pregunta al Gobierno autonómico si considera que el funcionamiento de esta entidad da respuesta eficaz a las necesidades del sector.

Uno de los problemas que afectó a la cofradía noiesa fue que tuvieron que recurrir a un laboratorio privado para conocer el estado de la mar porque «o Intecmar non traballa os fins de semana e, se non tiveran eses datos, os produtores irían a traballar o luns para despois ter que tirar o marisco ao mar ao ter toxina, provocando cuantiosas perdas».