El inicio de curso en los institutos de Barbanza se salva por la campana

Laura M. Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Unos 5.500 alumnos empiezan a incorporarse a las aulas a partir de hoy

23 sep 2020 . Actualizado a las 21:19 h.

Al límite. Así llegan los institutos al inicio del curso escolar, que este año roza los 5.500 alumnos en la comarca. La mayoría de centros abren hoy sus puertas a los alumnos de los primeros cursos y completarán la semana de presentaciones de manera escalonada hasta el viernes. Todos confían en empezar cuando les toca, pero lo cierto es que en tres de ellos están todavía pendientes de la llegada de mamparas. La ampliación de personal docente se les ha quedado corta y esta pantalla de protección es lo único que les permite cumplir con la distancia de seguridad entre los alumnos que fija el protocolo, marcada finalmente en metro y medio de separación.

El que tiene la situación más complicada es el IES A Cachada, que incluso ve peligrar la presentación de los grupos de tercero y cuarto fijada para el lunes. «Estamos pendentes da chegada das mamparas. A empresa que as produce díxonos que entre xoves ou venres deberían estar aquí», cuenta la jefa de estudios del instituto, Berta Gómez. Según los cálculos del centro boirense, necesitan hasta 250 de estas piezas.

También en el IES de A Pobra están pendientes de la llegada del centenar de mamparas que solicitaron. El secretario del centro, Pablo García, confía en que «cheguen hoxe [por ayer]». Las necesitan para las aulas de tercero y para una veintena más de espacios, como las clases de informática o los laboratorios. «Non podemos utilizar estas salas ata que non estean perfectamente acondicionadas», comenta García.

La lista de pendientes en el caso de los pobrenses no acaba con las mamparas. Necesitan además decenas de pantallas de protección facial para los alumnos de sus ciclos de formación profesional. «O traballo práctico, que é o que fan principalmente nestas ensinanzas, non ten sentido se os rodeamos de mamparas», afirma García.

Medidas poco adaptadas

El Número Un de Ribeira es el que tiene el trabajo más encaminado. «Chegáronnos sobre 25 mamparas», afirma el director del centro, Manuel Santiago. Pero necesitan como mínimo el doble, entre 50 y 100, para poder utilizar el edificio en su totalidad. Y eso que han implantado un sistema mixto y no todas las mesas llevarán colocados estos dispositivos de protección. «Intentamos optimizar os recursos», explican. Así, en las aulas con mayor número de alumnos y donde no se podía respetar la distancia entre todos los pupitres, se colocaron paneles en unos cuantos de ellos para cumplir el protocolo. El problema: la incorporación de nuevos alumnos a última hora. «Unha persoa máis nun grupo e xa teríamos que cambiar totalmente a disposición das aulas», cuenta el director. Y vuelta a empezar.

A pesar de la aplicación de estas medidas, los equipos directivos de los centros barbanzanos no las tienen todas consigo. «Quen deseñou estas medidas, fíxoo pensando nos colexios de primaria, pero non nos institutos», declara el director del Félix Muriel de Rianxo, Ramón Veiga. Los cruces por los pasillos entre alumnos de secundaria y bachillerato son inevitables, como también lo es la mezcla entre grupos del mismo nivel. «Comparten optativas», explica Veiga. Y en la misma situación se encuentra el Virxe do Mar noiés. En su caso, además de los cambios de aula, habrá circulación de alumnos entre los dos edificios de los que se compone el centro.

De todos modos, la intención de los centros es apostar por la presencialidad en la medida en que sea posible. «A configuración deste curso está lonxe do meu concepto de educación, pero teremos que tirar co que hai», declara Veiga.

Berta Gómez: «Estamos á espera da chegada de tres dos profesores que nos concederon»

En el IES A Cachada se quejan de la falta de personal. Así lo explica Berta Gómez, jefa de estudios del centro. «Estamos á espera da chegada de tres dos profesores que nos concederon», afirma. De los 13 que solicitaron para cumplir con los desdobles, les han adjudicado solo siete. Además, «dous deles están contratados a tempo parcial», aclara Gómez. Son los de Educación Física e Inglés y todavía no hay ningún candidato para estos puestos. Tampoco para otro de Xeografía e Historia. «Non sabemos cando poderemos contar con eles», explica la jefa de estudios.

  Por el momento, desde el centro no tienen previsto aplicar ninguna medida extraordinaria para paliar este déficit de docentes, que afecta especialmente a los alumnos de primero y segundo. «Faremos como cando un mestre non pode vir. Os que estean de garda encargaranse destes grupos. Outra cousa non podemos facer», afirma Gómez.