Un museo en los jardines Valle-Inclán

BARBANZA

La quinta edición de «Olladas na rúa» llenó de cuadros y esculturas la alameda pobrense

06 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

En una época como esta, en la que hay que evitar los espacios cerrados, cobran mayor importancia iniciativas como la que ayer llenó de arte los jardines Valle-Inclán de A Pobra. Por quinto año consecutivo, la exposición Olladas na rúa convirtió la alameda en un gran museo al aire libre en el que se dieron cita las obras de 32 artistas. Decenas de curiosos se acercaron a este pulmón verde del municipio para contemplar las creaciones, que destacaban por su originalidad y alta calidad.

La pintura y la escultura en todas sus expresiones fueron las dos técnicas que tuvieron representación en esta muestra, en la que se intentó reunir a un nutrido grupo de creadores de la comarca. Así, se contó con piezas firmadas por Che Tembra, Emilio Mariño, Jontxu Argibay, José Luis Bandín, Manuel Teira, Mónica Montero, Nucho Losada, Pepa Mariño, Platis, Ricardo Dávila y Sonagasallo.

El bloque de pintores aportó un mayor número de propuestas a esta quinta edición de Olladas na rúa, y en las improvisadas paredes de los jardines pobrenses se pudieron contemplar obras creadas por Alfonso Costa, Amparo Fuentes, Antía Brey, Antonio Pérez, Carmen Sampedro, Daniel Piñeiro, Esther Molinero, Fran Gess, Gloria López, Guille de la Paz, Javier Hermo, Julia Gema Fernández Pla, Manuel Ayaso, Manuel Rodríguez Varela, María Teresa González, Marian Briones, Paco Casal, Paola García, Pastor Rodríguez, Teresa Argibay y Xerardo Crusat.

Un catálogo

Una de las novedades de este año es que el Concello pobrense editó un catálogo en el que se recogen fotografías de las obras participantes en esta edición, que ha sido comisariada por Fita Sanisidro.

Además de las imágenes, también se cuenta con un texto del alcalde y la edila de Cultura, así como del director del Museo do Gravado, Xoán Pastor Rodríguez, que aplaude la iniciativa por su «accesibilidade, liberdade, diálogo entre a arte e o mundo real. A necesidade do, aparentemente, innecesario, pero imprescindíbel para nos ensinar outro xeito de ver o mundo».