«A estas alturas aínda hai pais que acaban de decidirse a encargar os libros de texto»

P. Bretal RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

Las librerías temen caídas de ventas por la incertidumbre sobre la vuelta a clase

02 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Forman parte de un sector habitualmente castigado por los cambios, ya sea el avance de las plataformas de compraventa en la Red o la proliferación del libro digital, pero la incertidumbre que ha generado la pandemia del covid-19 ante el inicio del curso también supone un mazazo para las librerías barbanzanas. Y es que tal y como explican desde la ribeirense Nobel: «A estas alturas aínda hai pais que acaban de decidirse a encargar os libros de texto».

La situación que describen los empresarios de este ámbito es similar a la que se encuentran muchos progenitores, entre el temor y las dudas sobre lo que ocurrirá la próxima semana con el regreso a las aulas, ante hipotéticos rebrotes que fuercen el regreso a las clases telemáticas.

«Estamos nun punto total de standby, porque os profesores aínda non teñen definida a organización e cos libros están na mesma tesitura», reconoce Cipriano Pose, de la pobrense librería Ler, donde han pedido un fondo de libros limitado con un pequeño porcentaje de posibilidad de devolución, «con todos os riscos que iso pode levar». En su caso solo ha tenido salida el 5 % del total que supuso el volumen de ventas de libros de texto el año pasado.

 A la espera

Aunque buena parte del material escolar se adquiere una vez realizada la presentación en los centros educativos, los libreros están notando el bajón en otros productos que sí se compran con mayor antelación. «O que se merca é pouco e con moita precaución», analiza María del Carmen Lijó sobre el material, señalando que los clientes «miran o que hai e se lle gusta ao rapaz, como por exemplo coas mochilas, pero non as levan á espera do que pase».

En este sentido, la librera indica que ya ha habido un colegio que ha sido previsor y, para el nivel de infantil -en el que las clases a distancia no son viables-, solo ha mandado adquirir los cuadernillos correspondientes al primer trimestre. «Investimos en libros e material escolar e se non o sacamos claro que hai medo», sentencian desde Nobel.

La situación no es igual en todos los establecimientos, pues hay familias que sí se decantaron por encargar los libros de texto con antelación. «As reservas téñoas máis ou menos igual que as do ano anterior», comenta Inma Blanco, de la librería Blanco de Noia, que mantuvo el habitual flujo de pedidos desde el fin del pasado curso.

No obstante, la situación con el material escolar es prácticamente idéntica también en este negocio noiés: «Estamos á expectativa, tamén é certo que moitas familias están pendentes de recoller a axuda do cheque escolar». La empresaria señala que ha notado un bajón, por ejemplo, en la compra de libretas en detrimento de folios, puesto que «sobre todo nos alumnos máis maiores xa non as piden, porque é máis sinxelo para facer fotocopias».

Los libreros apuntan a una de las claves ante la bajada de venta de material escolar, y es que todavía hay muchos estudiantes que conservan parte de estos recursos sin utilizar, a causa de la interrupción de las clases durante el estado de alarma. «Pasa cos cadernos de debuxo, as cores queren mercalas igual, pero moitos quedaron sen usar do pasado curso», anotan desde Nobel en Ribeira.

«Houbo xente previsora que comprou algún estoxo ou mochila, pero non moitos, pois aínda está a dúbida de como vai comezar realmente o curso», indican desde Ler. Esta no es la única queja que se está escuchando en este tipo de establecimientos en las últimas semanas, ya que, tal y como reseñan desde Blanco: «Moitos pais están desexando que a Xunta diga que comezamos en outubro».