Un batallón frente al covid-19 con más de 200 voluntarios

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

marcos creo

Miembros de Protección Civil e integrantes de Cáritas y Cruz Roja trabajan para garantizar el confinamiento y ayudar a quien lo precisa

28 abr 2020 . Actualizado a las 13:12 h.

La lucha contra una pandemia que ha alterado por completo la vida de miles de familias tiene muchos héroes. Lo son quienes salen cada día de sus casas para ir a trabajar, los que batallan contra la enfermedad en los centros sanitarios y también aquellos que, de una forma altruista, aportan su tiempo para hacer posible el confinamiento o para que las familias más vulnerables tengan cubiertos los servicios básicos. En la comarca, este batallón voluntario frente al virus lo forman más de 200 personas.

Ejercen su actividad en las agrupaciones de Protección Civil o en organizaciones humanitarias como Cruz Roja o Cáritas. La responsable de este último colectivo en Boiro, Lupe Tubío, afirma: «Esto mueve conciencias». Añade que «hay muchas personas que llaman para colaborar». Sin embargo, explica que ampliar la red es complicado por los riesgos de contagio.

Por regla general, las organizaciones benéficas se encargan de la distribución de alimentos y fármacos, una tarea que realiza Protección Civil en los concellos que carecen de este tipo de entidades. Precisamente, la importante labor de este colectivo ha quedado de manifiesto en esta crisis sanitaria.

La agrupaciones, formadas en su mayoría por voluntarios, realizan tareas tan diversas como desinfectar coches y calles, o repartir mascarillas y libros. Tienen retenes de guardia las 24 horas y están para lo que haga falta. El responsable del colectivo en A Pobra, David Cardalda, explica: «Visitamos a vecinos mayores y hay personas que viven en el extranjero y nos llaman para realizar la compra a sus familiares».

El secretario del grupo de Muros, José Manuel Ruibal, subraya la implicación: «Estamos para atender a quen o precise». Como sucede en el resto de concellos de la comarca, donde actúan bajo la coordinación de las áreas de Servizos Sociais.

Jaime Castilla: «Persoalmente, eu prefiro que me feliciten ou me dean as grazas que recibir cartos»

Marinero de artes menores, Jaime Castilla dedica su tiempo libre a colaborar con Protección Civil. Sale a faenar a las cinco de la mañana y regresa a las cuatro de la tarde, pero los responsables de la agrupación afirman que siempre está disponible. Su estrecha vinculación con el colectivo comenzó en otra situación especialmente trágica para Galicia: cuando se produjo el accidente de Angrois. Desde entonces, sus lazos con la agrupación se han reforzado: «Síntome orgulloso de poder cooperar».

Casado y con un hijo, Jaime Castilla comenta que su mujer entiende perfectamente su dedicación: «Cando me coñeceu eu xa era voluntario en Protección Civil, así que non hai problema».

Labores de desinfección

Durante la crisis sanitaria, su labor consiste en realizar tareas de limpieza: «Desinfectamos os espazos públicos, as fachadas dos establecementos que están abertos ao público e as rúas». Es un trabajo a mayores, pero Jaime Castilla no lo ve así: «Persoalmente, eu prefiro que me feliciten ou me dean as grazas que recibir cartos. A xente apóianos moito e amosa a súa gratitude».

Su principal esperanza «é que isto pase dunha vez. Que non continúe a expandirse e que non haxa máis vítimas».

De igual manera que trabaja en la protección de los demás, Jaime Castilla también piensa en la suya y en la de su familia: «Cando chego, quito o uniforme na porta da casa e métoo nunha bolsa de plástico para lavalo despois».

El voluntario comenta que a la hora de ejercer el trabajo de desinfección en las calles, disponen del material necesario. Explica que la prevención constituye un elemento esencial para frenar el avance del coronavirus y, por eso, está dispuesto a contribuir a que los vecinos se queden en casa y que, si deben salir, lo hagan con la mayor seguridad.