El estudio epidemiológico arrancó con ausencias y voluntarios espontáneos

Marta Gómez Regenjo
M. Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

carmela queijeiro

En los centros de salud de Barbanza se realizaron alrededor de 200 test en el primer día de la investigación

25 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Son cerca de dos mil -1.890 para ser exactos- los barbanzanos que serán citados para participar en el estudio epidemiológico impulsado por la Xunta para conocer la incidencia del covid-19 en la población, una investigación que echó a andar ayer con bastante expectación y con todas las cautelas por parte del personal sanitario, que tuvo la precaución de llamar a un número reducido de pacientes en previsión de posibles incidencias en el primer día de realización de los test. Apenas las hubo, salvo algunos problemas informáticos en el centro de salud de Muros, y lo más reseñable son algunas ausencias entre las personas seleccionadas para participar en el estudio y la aparición de voluntarios espontáneos entre quienes no habían sido llamados.

La elección de los participantes fue aleatoria, pero no faltó quien llamase a los ambulatorios preguntando dónde tenía que apuntarse para colaborar en el estudio. Quienes sí fueron citados por el Sergas respondieron de forma muy mayoritaria a la llamada: «Eu calculo que menos dun 10 % rexeita participar, en xeral a xente apúntase a todo», señalaba un médico barbanzano. En el conjunto de la comarca se realizaron ayer unas 200 pruebas y las ausencias fueron mínimas. Hubo un par de pacientes en Ribeira que no pudieron acudir a la cita por dificultades de transporte para desplazarse al centro de salud, y un muradano al que el confinamiento lo cogió en Madrid y no puede someterse al test. En Muros y en Outes hubo alguna persona que declinó participar en el estudio, pero en general la colaboración es total.

«Hay un listado de sustitutos para este tipo de situaciones, nadie tiene la obligación de hacerse la prueba», explicaban en Rianxo, donde ayer se citó a 35 personas.

Demora en Portosín

La actividad se desarrolló con normalidad en todos los centros, salvo en el de Portosín, donde no fue posible empezar a llamar a los participantes hasta ayer por la mañana, por lo que los primeros cinco test se realizarán el lunes. En centros pequeños como el portosinense o el de Xuño, se organizan las agendas de tal modo que las personas que participan en el estudio no coincidan con otros pacientes.

En los ambulatorios más grandes hay dos opciones para evitar los contactos: utilizando una segunda entrada o espacios habilitados en los puntos de atención continuada, o en carpas instaladas en el exterior, sin necesidad incluso de bajarse del coche, como en Carnota, Muros y Ribeira.