El inventor Manuel Mato vuelve a Barbanza

M. X. B. RIBEIRA

BARBANZA

El boirense acaba de trasladar el taller que tenía en Padrón al polígono industrial de Té

26 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Inició su andadura hace unas cuatro décadas en su tierra natal, en un pequeño taller situado en la localidad boirense de Cespón, pero la necesidad de contar con más espacio llevó a José Manuel Mato Rodríguez a trasladarse después a una nave de Padrón. Hace unos días este empresario e inventor regresó a su casa de Barbanza, a unas instalaciones situadas en el polígono industrial de Té, en las que dispone de 1.300 metros cuadrados de superficie.

Mientras celebraba con familiares y amigos la apertura en Rianxo de Talleres Lacambra, reconocía que todavía sueña con instalarse en Boiro. Desde su empresa trabaja en dos frentes: la mecanización de piezas de alta calidad y precisión por un lado, y el diseño y fabricación de máquinas especiales para los distintos sectores industriales por otro. Vamos, que José Manuel Mato mejora lo que ya existe y crea lo que todavía no está inventado.

Por poner algunos ejemplos, ahora mismo está inmerso en la remodelación para Pepsi de una caja, que pasará a dar cabida de 24 a 28 botellas. Pero ha realizado otros muchos proyectos, como una máquina dedicada a la fabricación de cuerdas de mejillón para Chicolino, una limpiadora de probetas para Repsol o una máquina para una fábrica de cañones estadounidense. Incluso el Gobierno cubano contactó con él para que le proporcionara un mecanismo con el que lavar y secar los motores industriales.

Éxito del boca a boca

Si difícil puede ser encontrar solución a los problemas que le plantean a este inventor, entrar en contacto con todos estos clientes no debe ser menos. «Non sei nin eu como fan para atoparme, porque eu non visito a ningún», asegura José Manuel Mato. Hasta lograban encontrarlo hace años, cuando carecía de página web y el uso de Internet no estaban tan extendido: «Penso que unhas empresas me van recomendando a outras e así é como chegan a dar comigo».

Cuando los numerosos encargos que tiene se lo permiten, este inventor boirense crea aparatos que patenta. Uno de los últimos permite separar con relativa facilidad el aceite del agua.