Una aventura de 14 días y más de 3.200 kilómetros sobre dos ruedas

María Xosé Blanco Giráldez
m. x. blanco RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Carmela Queijeiro

Viajaron en moto desde Washington, haciendo paradas en Irlanda e Inglaterra

30 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Tienen en común el lugar de residencia, el estado norteamericano de Maryland, las raíces ribeirenses y una pasión desenfrenada por las motos. Fue esta afición, junto con su deseo de pisar la tierra en la que nacieron y a la que regresan siempre que pueden, la que llevó a Manuel Santos Sanlés, Andrés Santos Cañestro y a los hermanos Jose y Gabriel Santos García a embarcarse en una aventura consistente en pasar 14 días sobre dos ruedas para recorrer más de 3.200 kilómetros. Es la distancia que separa Washington de Santa Uxía con paradas en Irlanda y el Reino Unido, sumándole claro está los recorridos en un avión y dos ferris.

El grupo de aventureros empezó hace seis meses a preparar el gran viaje. Compraron las motos, todas de la marca BMW, modelos similares al que utilizó el actor escocés Ewan McGregor para dar la vuelta al mundo, desde Londres hasta Nueva York. El segundo paso fue colocar una gran mapa en la oficina de la empresa de construcción que Jose, Gabriel y Andrés tienen en Maryland. Ahí cada uno marcaba aquellos lugares que consideraba imprescindibles.

Manuel Santos, que es tío de sus tres compañeros de viaje, marcó en rojo el santuario de Lourdes. Su madre lo había ofrecido allí cuando de niño sufrió una enfermedad y siempre tuvo la espina clavada. Andrés hizo su aportación con sendas señales sobre Pamplona y los Pirineos. Poco a poco fue cogiendo forma una ruta que arrancó en Washington, desde donde los moteros fueron dejando atrás Pensilvania, Nueva York y Toronto. Desde allí, cruzaron en avión hasta Irlanda, para recorrer la costa montados en sus caballos de acero. Un ferri los llevó hasta Gales. El sur de Inglaterra fue su siguiente parada, antes de embarcar rumbo al territorio español, al que accedieron a través de Santander.

Lo mejor, el paisaje

Desde el principio, los aventureros tuvieron claro que la meta estaba Ribeira, donde se encuentran sus raíces y un buen número de familiares, pero antes querían atravesar los Pirineos y hacer paradas en Pamplona, Bilbao, Llanes, los Picos de Europa, Cudillero y San Andrés de Teixido. Tras 14 días de ruta, los cuatro moteros pisaron el suelo de Santa Uxía que tanto añoran. Andrés se emocionaba al recordar algunos momentos del viaje: «Lo mejor fueron, sin duda alguna, los Pirineos. Acabamos mojados y calados de frío, pero nunca se me olvidarán las imágenes. Los Picos de Europa también son muy bonitos».

Por contra, no tenía nada que situar al otro lado de la balanza, la de la parte negativa de la aventura: «Es que ni una rueda pinchada. Cierto es que tuvimos tres jornadas de lluvia, que puede decirse que nos empañó un poco la ruta, pero nada más». Aseguraba, además, que sus ojos y los de sus compañeros brillaron de forma especial al llegar al territorio español: «Irlanda tiene montañas muy hermosas, pero nada comparables a las de España».

Ese paisaje es, según señaló, el que estos ribeirenses echan especialmente en falta cuando están lejos de la tierra que los vio nacer, por eso todos tienen claro que regresarán a Barbanza en breve. Aquí han dejado sus motos, puesto que quieren que Santa Uxía sea el punto de partida de su próxima aventura, que discurrirá probablemente por el vecino país de Portugal para concluir en el sur de España.