El PP fue batido por los socialistas en la circunscripción de la parroquia de O Obre
BARBANZA
Los populares bajaron en todas las mesas dejándose en el camino 433 votos con respecto a los comicios del 2015
29 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Los populares noieses están en una situación similar al partido a nivel nacional. Los resultados no le han sido favorables e incluso han bajado con respecto a las elecciones de hace cuatro años, pero en la mayoría de sus representantes la sonrisa se le nota de oreja a oreja. A pesar de contar con menos apoyos que en el 2015, tienen muchas más posibilidades de gobernar. Incluso fueron segundos en O Obre, por detrás de los socialistas. Perdieron un concejal -el domingo consiguieron siete-, pero la opción que lidera Marisol Villar, con la que formaron gobierno en los últimos tres años, les puede aupar de nuevo al gobierno para formar una mayoría absoluta que le haga una singladura mucho más placentera.
La caída del partido conservador en el término noiés la aprovechó prácticamente el PSOE, que estrenaba candidato, Sergio Campos, y que se quedó con el acta de concejal que perdió el PP y se hizo con un botín de 461 votos más que las anteriores municipales, mientras que el partido de Santiago Freire se dejó en estos cuatro años 433 sufragios por el camino.
La parroquia de Noia tiene adscritas diez mesas electorales en las que los populares se llevaron un total de 1.687 apoyos, 235 menos que en los comicios del 2015.
Goteo incesante
El grupo que encabeza el regidor en funciones, Santiago Freire, fue dejando atrás decenas de votos en todas las parroquias del término municipal. En Argalo perdieron veinte papeletas, mientras que en O Obre se produjo el descenso más pequeño con solo 11 sufragios menos que en las anteriores elecciones municipales. El goteo fue incesante y en Boa los populares se dejaron atrás 27 distintivos con el símbolo de la gaviota.
Otra importante caída del PP en Noia se produjo en las cinco mesas de Barro pues la opción conservadora contabilizó 104 votos menos que hace cuatro años. En la última circunscripción, en la de Roo, la formación de Pablo Casado obtuvo 36 sufragios menos que la anterior cita de las municipales. El descenso de más de 400 apoyos dejó como consecuencia un edil menos. A pesar de este contratiempo, el equipo de Santiago Freire tiene muchas opciones para seguir con el bastón de mando del Concello.
Inercia favorable
La marea roja que ha llegado tanto a España como a Galicia en las últimas convocatorias también tocó Noia en forma de apoyos. Los socialistas locales renovaban a su candidato y hasta a su lista llegó la inercia favorable del PSOE. Ataron el segundo puesto en los comicios del domingo con cerca de 2.300 sufragios, prácticamente el doble que su inmediato perseguidor, la Marea Cidadá.
Sergio Campos y su equipo de trabajo trasladaron al electorado un programa al que le sacaron unos réditos de cinco concejales, uno más que la cita de hace cuatro años. A pesar de mejorar el resultado, tiene menos opciones que su antecesor para hacerse con la alcaldía, ya que Miguel Paz se hizo con el bastón de mando al conseguir el apoyo del resto de formaciones, excepto el PP.
Los socialistas subieron en todas las parroquias, excepto en la de Boa, donde obtuvieron nueve sufragios menos que en el 2015. En el resto de lugares, los montones del recuento fueron más importantes y en especial en la parroquia de Noia donde se contabilizaron 383 puños y rosas más que en los anteriores comicios municipales.
El PSOE noiés incluso superó al partido de la gaviota en la mesa electoral de O Obre al vencer a los populares en nueve papeletas, consiguiendo así una victoria moral y evitando que el color azul mandase en todas las urnas del término municipal.
El PSOE consiguió 461 votos más en el municipio que en las municipales de hace cuatro años