La comarca está a la cola de Galicia en la recogida de aceite doméstico

Ana Lorenzo Fernández
ana lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MATALOBOS

Cinco concellos disponen de contenedores, en los que se depositaron 23 toneladas

17 abr 2019 . Actualizado a las 12:22 h.

Tirar el aceite de cocina usado por el fregadero o por el inodoro no solo provoca malos olores y genera problemas en las redes de saneamiento y en las depuradoras, sino que también contamina ríos y mares, ya que es un producto que no desaparece y que se convierte en un importante enemigo para el medio ambiente. En cambio, si se separa correctamente, se puede reciclar y convertir en jabón, biodiésel o incluso pintura. Por este motivo, cinco concellos de la comarca han instalado en las calles alrededor de 60 contenedores para la recogida de este residuo, una práctica que todavía no ha calado mucho en los barbanzanos, ya que por el momento se sitúan a la cola de Galicia en volumen de producto recogido.

Según los datos que maneja la empresa responsable del servicio -Procesadora Gallega de Alimentos- solo se retiraron una media de 340 gramos por habitante en estos municipios, cuando se calcula que cada vecino deshecha anualmente seis kilos de aceite doméstico. Uno de motivos que explica esta situación es que hay algunos ayuntamientos, como A Pobra y Ribeira, que todavía comenzaron el ejercicio pasado con esta iniciativa, por lo que la cantidad de producto que se dejó en los recipientes urbanos no es muy significativa.

Con todo, entre los cinco concellos -a los dos primeros se unen Noia, Muros y Rianxo- se retiraron 23 toneladas de este residuo, una cantidad muy importante si se tiene en cuenta que cada litro de aceite contamina como mínimo 1.000 de agua, lo que significa que se dejaron de contaminar algo más de 23 millones de litros en ríos y en el mar.

Concienciación

Javier Pardo, portavoz de la empresa Procesadora Gallega de Alimentos, reconoció que falta todavía mucha concienciación, tanto por parte de los ciudadanos como de los representantes de las Administraciones locales para poder incrementar el volumen de aceite doméstico recogido. «Los responsables municipales no lo ven como una prioridad inmediata, porque siempre piensan en actuaciones más urgentes, pero esto es muy importante para cuidar el medio ambiente», apuntó, al mismo tiempo que anunció que están en negociaciones con otros concellos de la comarca para implantar este servicio, «que es prácticamente gratuito».

En este sentido, Pardo reconoció que todo son ventajas para los municipios, ya que al disminuir la cantidad de aceite que se vierte a las cañerías se evitan problemas en las redes de saneamiento, al mismo tiempo que se reduce la contaminación. «Lo que tenemos comprobado es que, una vez que se implanta el servicio, el vecino siempre lo acoge como una buena idea, y los registros no paran de crecer», señaló.

340

Gramos por habitante

Es la media que se obtuvo del aceite doméstico retirado en los cinco concellos barbanzanos, una cifra muy pequeña si se tiene en cuenta que cada vecino genera anualmente seis kilos de este residuo.

1.000

Litros de agua

Se calcula que cada litro de aceite contamina, como mínimo, 1.000 de agua, además de causar daños en las redes de saneamiento y depuradoras.