El catedrático de la Universidad de Salamanca impartió un curso sobre esta nueva técnica en el Museo de Artes
29 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Del desconocimiento absoluto a poder crear dos grabados en tres dimensiones de gran calidad en apenas dos días. Ese fue el resultado del taller que este fin de semana impartió el artista José Fuentes Esteve en el Museo do Gravado de Artes y al que pudieron asistir un total de 12 personas llegadas desde toda Galicia. Según reconoció el catedrático de la Universidad de Salamanca, esta técnica significa cambiar con todo lo que se hacía previamente.
En el grabado tradicional se hacían unas incisiones con un buril en una plancha de cobre o zinc, la parte tallada recibía tinta y a través de un tórculo se transfería de la matriz al papel. «Ahora la plancha ya no es de metal, sino de un plástico especial, y ya no hay hoja de papel, sino que esta se confecciona con pulpa de papel de colores adaptados a la imagen que se va a realizar», especificó José Fuentes.
Sensación espectacular
El resultado del curso fueron obras con unos relieves que pueden llegar a tener medio centímetro y que confieren «una sensación espectacular». El artista reconoció que el resultado del taller fue impresionante, y que en gran parte se debió al laborioso proceso de organización de las clases para conseguir realizar todos los pasos de este laborioso proceso en tan poco tiempo.
Para ello, fue indispensable la colaboración de Matilde Gómez Osuna y Luís Fernanda Gallego, así como de dos alumnos de la Escola de Belas Artes de Pontevedra, que ayudaron a José Fuentes en este curso. Todas las obras de este taller, así como de uno que hubo previamente, conformarán una muestra que se abrirá en abril en el Museo do Gravado.