La entidad social con sede en Ribeira busca patrocinadores para poder financiar su ingreso en el torneo
27 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El deporte para la entidad social Ambar siempre ha sido algo más que una vía perfecta para la mejora de la calidad de vida de sus usuarios, pues se ha hecho un hueco en los corazones de estos. Hace un par de años, se creó un equipo de fútbol sala para que un día a la semana se calcen las botas y disfruten de este deporte en el pabellón Alcalde Torres Colomer de Palmeira. No obstante, ahora quieren dar un paso más e inscribirse en la liga gallega. Pero como cualquier otro conjunto deportivo, necesitan un patrocinador.
«Levamos moito tempo traballando no deporte inclusivo porque se trata dunha gran ferramenta para o aumento da autoestima. O feito de pertencer a un equipo ou marcar un gol pode supoñer algo moi importante», explicó Helena Teira, coordinadora xeral de Ambar, recordando la trayectoria que han dibujado en este ámbito, por ejemplo, cuando se convirtieron en los primeros de la comarca en organizar una carrera inclusiva en Galicia.
Los motivos
«Temos un pulo importante de seguidores fieis e pensamos que se os nosos xogadores se federan pode ser un proxecto interesante para a bisbarra. Ademais, coñecer a novas persoas e forxar amizades suporá unha mellora da autonomía», anotó Teira del grupo mixto de 15 usuarios que ya están deseando vestirse la equipación amarilla y negra.
«A idea de crear este equipo naceu da propia paixón dos usuarios ao fútbol, pero nesta zona non contan coa posibilidade de competir e tiñan que limitarse a seguir os partidos polos campos de Boiro, Ribeira, A Pobra...», explicó Pablo Mariño, responsable del área de Deportes de Ambar, para precisar que «trátase de que deixen de estar condenados a ser meros espectadores para converterse en protagonistas».
Esta competición en la que se prevé la participación de una decena de equipos comenzará el 20 de febrero y todavía está pendiente de concretarse si se dividirá en dos bloques regionales, pero el calendario estará conformado por tres jornadas mensuales -febrero, mayo y octubre- en los que se disputarán dos partidos para llegar un torneo nacional final. Y la ilusión prendió como una mecha en Ambar cuando supieron que podrán medirse a conjuntos de la talla del Dépor y el Celta de Vigo, que también cuenta con bloques en esta competición adaptada.
«Igual que para todas as persoas o deporte supón melloras na coordinación e no control da postura corporal, así como beneficios para a saúde combatendo o sedentarismo. Do mesmo xeito, o aprendizaxe das regras do deporte tamén se reflicte no da vida cotiá» analizó Mariño, precisando que el objetivo no es el de ganar, sino el de fomentar la práctica deportiva sin restricciones, sin más barreras que la propia pasión. No obstante, tampoco esconde que «de entrada creo que temos potencial para quedar en postos altos da competición».
El hecho de que los integrantes del equipo entren en la Federación Galega de Deporte Adaptado también les permitiría acceder a competiciones de otras disciplinas que practican.
Y es que el deporte en Ambar se vive desde en el mar con la vela al ring con el boxeo, pasando por el pádel, la natación, el taekuondo, el atletismo y hasta con clases de pilates.
Un apoyo vital
La realidad es que los futuros aurinegros ya se han armado de ilusión y tan solo falta que llegue el calor de aquellos dispuestos a estampar su nombre en el equipamiento deportivo de Ambar.
De la tarea de que esos colores y logos brillen aún más por toda Galicia ya se encargarán ellos, los futbolistas llamados a demostrar que los barbanzanos portan el fútbol en las venas. Sin miedo, solo buscando disfrutar un poco más del deporte rey.