Casas rurales y restaurantes cierran con llenos el 2018

María Xosé Blanco Giráldez
m. x. blanco RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CEDIDA

Solo en Chicolino recibirán el nuevo año más de 700 personas

30 dic 2018 . Actualizado a las 11:24 h.

Hasta no hace muchos años, lo habitual era celebrar el Fin de Año con una cena familiar para acabar después la larga noche, sobre todo los más jóvenes, en las zonas de movida. Pero, poco a poco, los hábitos fueron cambiando. Los barbanzanos se muestran cada vez más partidarios de pasar la noche del 31 de diciembre fuera de casa. Locales hosteleros que antes cerraban sus puertas, ofrecen cenas especiales, cotillones y otras actividades que enganchan a los clientes. Tanto es así que restaurantes y casas de turismo rural darán la bienvenida al 2019 con llenos.

Solo en las instalaciones que el grupo Chicolino tiene en Abanqueiro se darán cita mañana por la noche más de 700 personas. De ellas, 400 asistirán a una cena a base de cigalas, camarones, rape, solomillo y los postres navideños de rigor. Las otras 300 se sumarán a la fiesta después de las campanadas, cuando arranque un cotillón que se prolongará hasta las siete de la mañana.

Otros negocios que en años anteriores también ofrecían cena de Nochevieja, han optado en esta ocasión por mantener solo el cotillón, una cita festiva que, por lo que se ve, cotiza al alza en esta comarca. El Torre de Xunqueiras pobrense registrará tras las campanadas su primer lleno, al haber agotado las 150 entradas para la fiesta de Fin de Año; mientras que en el Baiuca ribeirense está previsto que se concentren en torno a 300 clientes. También A Cascada, el restaurante del cámping de Oleiros, ha optado en esta ocasión por ofrecer solamente un cotillón, al que asistirán en torno a un centenar de personas.

Los barbanzanos que se han sumado a estas y otras propuestas abonarán cantidades que llegan hasta los 55 euros por disfrutar de una fiesta que, en la mayor parte de los casos, incluye baile con barra libre, picoteo y el imprescindible chocolate con churros para endulzar el arranque del nuevo año.

Fin de Año tranquilo

También hay quien ha apostado por un comienzo del 2019 tranquilo. Son varias las casas de turismo rural que cerrarán el 2018 con un lleno y eso que algunas ni siquiera ofrecen cena: «Boa parte dos nosos clientes veñen para despedir o ano ao lado da cheminea. Algúns fan a súa propia cea e outros, encárgana», comentaba la propietaria de un negocio hostelero de Rianxo. Añadía que, a diferencia de la tendencia del pasado, ahora cada vez son más habituales las escapadas navideñas.

Desde las cabañas de Outes también aludían a un lleno para este puente e incluso para el fin de semana de Reyes: «As vacacións están cobrando gran relevancia incluso nestas datas de Nadal».