El comercio local generaliza las ofertas para frenar la fuga de clientes

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Las rebajas anticipadas que buscan captar compradores suscitan controversia

28 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace tiempo que asociaciones de empresarios, vendedores y Administraciones alertan sobre el declive del comercio local, animando a los consumidores a realizar sus compras en los negocios de su entorno. Sin embargo, las grandes superficies e Internet constituyen una competencia cada vez más difícil de afrontar para las tiendas tradicionales, algo que sus dueños notan de manera especial en fechas como las navideñas, en las que un elevado número de profesionales consultados afirman haber detectado un importante descenso en el volumen de adquisiciones. Ante esta situación, muchos comerciantes de Barbanza se han decantado por realizar ofertas con el ánimo de evitar la fuga de clientes.

La mayoría anuncian sus promociones, que oscilan entre el 20 y el 50 %, pero otros prefieren no publicitarlas en el escaparate y, sin embargo, agasajar a los compradores con un descuento. La realización de ofertas antes del período oficial de rebajas está generando en la comarca un intenso debate entre quienes consideran que esa no es la solución y los que opinan que no queda otra alternativa.

La ley del más fuerte

El empresario Marcos Casais, con tiendas de ropa deportiva en Ribeira y Noia, asegura: «Hay determinados artículos que a mí ya no me los sirven porque solo los envían a grandes tiendas. Las marcas van con los más fuertes, dándoles mayores ventajas, y el pequeño comercio si puede cerrar, mejor». Este profesional se muestra bastante pesimista sobre el futuro: «Esto es una guerra que irá a peor».

Por su parte, el boirense Daniel García hace un balance positivo de la campaña navideña y explica que cada vez se compran más regalos para Papá Noel. En su caso, comenta que el pasado año ya se decantó por no realizar ofertas anticipadas: «As rebaixas deberían volver a estar reguladas, a ter datas fixas, e nós procuramos mantelo».

A la comerciante ribeirense Ana Lampón tampoco le parece apropiado realizar promociones de manera constante. Sin embargo, explica que en esta ocasión se ha visto forzada: «No queda más remedio, porque las ventas han bajado mucho. Hablo con personas de otros establecimientos y todos coincidimos».

La mayoría recalca que noviembre fue un mes malo y que tenían sus esperanzas puestas en las celebraciones navideñas.