La construcción de la rula había costado 1,2 millones de euros y disponía de 3.600 metros cuadrados de superficie
06 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Hace hoy 29 años, el entonces director xeral de Obras Públicas, Joaquín de Medrano, visitaba la capital barbanzana para inaugurar las instalaciones de la nueva lonja de Ribeira, «la mejor dotada» que en aquel momento había en la comunidad gallega, como señaló el representante autonómico. De hecho, la construcción de estas instalaciones supuso un desembolso de 210 millones de pesetas -1,2 millones de euros-, con los que se levantó un edificio de 3.600 metros cuadrados de superficie repartidos entre las zonas de transacciones pesqueras y los almacenes. Además, también se aprovechó para acometer una serie de mejoras en la muelle norte, así como una explanada, que en aquel momento estaba pendiente de pavimentar.
Durante casi tres décadas, la actividad pesquera de Ribeira tuvo como escenario esta rula, hasta que en agosto del año pasado entró en funcionamiento la nueva lonja, un moderno edificio diseñado por César Portela de 22.500 metros cuadrados.