En el registro en su casa también se localizaron distintos tipos de drogas y 51 plantas de marihuana
05 dic 2018 . Actualizado a las 20:03 h.Se daba por hecho que el registro realizado en la jornada de ayer en una vivienda de la calle Irmáns Insua de Rianxo tenía que ver con el trapicheo de drogas y, efectivamente, los agentes que participaron en el operativo encontraron distintos tipos de sustancias estupefacientes y 51 plantas de marihuana. Sin embargo, el rianxeiro detenido, J.M.V.T., de 47 años de edad, también guardaba en su casa un arsenal de armas.
La investigación, bautizada como operación Stop, comenzó cuando la Guardia Civil tuvo sospechas de que el hombre podría estar en posesión de varias armas de fuego. Durante las labores policiales se pudo observar que el detenido se dedicaba a disparar desde su ventana a una señal de tráfico sin motivo aparente. A primera hora de la mañana del lunes un amplio despliegue de agentes irrumpió en su vivienda echando la puerta abajo e inició un registro en el que se localizaron tres carabinas de aire comprimido, una carabina del calibre 22, una pistola de aire comprimido y un revólver de aire comprimido, así como cartuchos de diverso calibre.
En el operativo, en el que intervinieron el Grupo de Información, la Unidad de Seguridad Ciudadana (Usecic), el Servicio Cinológico e Intervención de Armas, también se incautaron 343 gramos de hachís, 20 gramos de cocaína, 150 gramos de heroína y 51 plantas de marihuana que el rianxeiro cultivaba en su vivienda con todo tipo de lámparas y sistemas de ventilación. También se requisaron 1.185 euros y diverso material para preparar el corte de la droga y las dosis.
Por todo esto, J.M.V., está acusado de tenencia ilícita de armas -un delito por el que ya había sido detenido a principios del año pasado-, otro delito contra la salud pública y otro de defraudación de fluido eléctrico, ya que tenía puenteado el cableado exterior para alimentar las lámparas y sistemas de ventilación que empleaba para el cultivo de las plantas de marihuana.
Gran despliegue
«Parecía unha película». Con el susto todavía en el cuerpo, una vecina de la calle Irmáns Insua de Rianxo relataba cómo pasadas las nueve de la mañana de ayer al menos una docena de agentes de la Guardia Civil con chalecos, armas y pasamontañas habían irrumpido en una vivienda situada a pocos metros. Allí permanecieron hasta primera hora de la tarde practicando un exhaustivo registro en el que contaron con el apoyo de perros de la unidad canina y que se saldó con un hombre detenido.
Se trata del propietario del inmueble en el que se realizó el registro, enmarcado presumiblemente en una operación antidrogas. La vivienda, a la que se había trasladado hace unos meses, era un punto de venta conocido en la localidad y el detenido cuenta con antecedentes. Hace cerca de dos años fue detenido con varias dosis de cocaína y marihuana, además de una pistola de imitación.
Un vehículo de su propiedad y otro inmueble de la villa en el que vivía antes de mudarse también fueron registrados, y no se descarta que las actuaciones se hayan extendido a otras localidades de la comarca.
El juez decretó ingreso en prisión del rianxeiro, según apuntaron fuentes de la operación Stop.