La parroquia de Carreira premió a sus vecinos destacados

La Voz

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

El deportista Abraham Benítez y el club de fútbol local fueron los galardonados en esta edición

07 nov 2018 . Actualizado a las 09:34 h.

La asociación de vecinos de la parroquia ribeirense de Carreira se vistió de gala hace unos días, con motivo de la celebración de su cena anual. Además de disfrutar de una actividad lúdica y estrechar lazos de unión, la cita tenía como finalidad distinguir a dos destacados residentes, culminando así un proceso que comenzó hace varias semanas a través de Internet y que contó con la participación de un nutrido grupo de ciudadanos.

A la fase final llegaron, disputándose el premio Carreirense do Ano, la doctora en medicina molecular Cristina Calviño, el concejal Víctor Reiriz y el deportista Abraham Benítez. Fue este último, quien durante muchos años se encargó de organizar la carrera de A Guía y actualmente entrena a personas con discapacidad, el que resultó elegido por el jurado.

Mientras, el club de fútbol local, que lleva 40 años promoviendo el deporte de base, se llevó el galardón Carreirense de Horna, distinción que recogió su presidente, Francisco Sieira. En esta categoría habían logrado llegar a la final el dramaturgo Quico Cadaval y el que fuera concejal Manuel Dieste Mos, fallecido en octubre del 2017.

Monólogo sobre educación

La presidenta de la asociación de vecinos, Marivén Sampedro, y el secretario, Ramón Sampedro, ejercieron de maestros de ceremonias en la gala que tuvo lugar en el restaurante Baiuca. El segundo hizo su intervención en forma de un monólogo que giró en torno a la educación de aldea y a las diferencias que a día de hoy siguen existiendo en este ámbito entre las zonas rural y urbana. Siguieron con atención la alocución los políticos presentes en la cena: el alcalde, Manuel Ruiz, y los concejales Xosé Antonio Cobas y Víctor Reiriz.

Los responsables del colectivo se mostraron satisfechos con el resultado de la gala, a la que acudieron 85 personas, si bien apuntaron que es probable que en el futuro pase a ser una comida: «Cremos que é un horario máis axeitado para os veciños», comentó Ramón Sampedro.