Lavacolla pierde este invierno más de 200 vuelos respecto al anterior

S. Lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

BARBANZA

XOAN A. SOLER

Los mayores ajustes merman la conexión del aeropuerto compostelano con Barcelona, Londres y Milán

02 nov 2018 . Actualizado a las 21:05 h.

La estrategia conservadora que marca la programación de las aerolíneas en Lavacolla para la temporada de invierno implicará la pérdida hasta abril de más de 200 vuelos regulares respecto a los que las compañías operaron en la terminal durante la misma campaña del año pasado. Los usuarios que se verán afectados en mayor medida por esos ajustes serán los de las conexiones con Barcelona, Londres y Milán, en el caso de las dos últimas, como consecuencia de la decisión de Vueling y de EasyJet de prescindir de los servicios que ofrecieron en la pasada temporada invernal con la capital británica y con el aeropuerto de Bérgamo.

Santiago dispondrá hasta la primavera próxima de una media de 23 frecuencias semanales con Barcelona. Son ocho menos que las 31 que Vueling y Ryanair operaron durante el invierno anterior. Solo ese recorte implica dejar a la terminal de Lavacolla con 176 servicios menos con el aeropuerto de El Prat a lo largo de las 22 semanas de la campaña que arrancó el pasado fin de semana.

Más reducciones

La desaparición de la conexión con Londres de la programación de la aerolínea catalana se traduce en la pérdida de cuatro frecuencias semanales en ese destino. El enlace diario del pasado invierno se queda esta temporada en tres a la semana. Y los cinco vuelos semanales entre Lavacolla y Milán de la anterior campaña invernal quedan reducidos a dos.

Las buenas noticias se localizan en un refuerzo de los servicios con Madrid de Iberia Express, que recurrirá, además, a aviones con mayor capacidad. Aunque esta apuesta tampoco mitigará la brecha entre las frecuencias con Barajas disponibles en Santiago (40 a la semana) respecto a las programadas en A Coruña y Vigo (55 en cada caso). También aumentan los enlaces de Lavacolla con Bilbao (de 13 a 15) y con Alicante (de 5 a 7). Y el grueso de la oferta exterior mantiene los mismos servicios que en el invierno pasado, como sucede con Basilea, París, Dublín, Roma o Múnich.

Este saldo negativo en la programación invernal no pondrá en peligro el nuevo récord de pasajeros que Lavacolla alcanzará en este 2018, pero frenará su expansión en el primer trimestre del 2019.

Ryanair cobra ya 8 euros por el equipaje de menos de 10 kilos que antes viajaba gratis

La aerolínea irlandesa Ryanair puso en marcha ayer la nueva política de equipaje de mano a bordo de la cabina que obliga a sus clientes a pagar por los pequeños bultos de menos de 10 kilos de peso que hasta ahora podían llevar de forma gratuita en la zona del pasaje y que ahora irán en la bodega. De entrada, esta medida incentivará la adquisición de billetes con embarque prioritario, aunque los pasajeros que recurran a esa modalidad tampoco se librarán de rascarse el bolsillo para que esa pequeña maleta que antes portaba sin coste económico adicional vaya en la bodega.

Así, el cliente que abone 6 euros por el embarque con prioridad no tendrá que hacer ningún desembolso adicional por esa maleta de menos de 10 kilos. Con esa fórmula, ahorrará dos euros en relación a los 8 que, en el momento de la reserva, deberán abonar por un bulto de esas mismas características los viajeros de la low cost irlandesa que no pertenezcan a la clase priority. Pero ojo con llegar a la puerta de embarque con esa pequeña maleta, porque conllevará el desembolso de 25 euros.

Esta nueva política de la compañía que copa más del 40 % del tráfico comercial en el aeropuerto de Santiago solo contempla la opción de que sus usuarios puedan llevar a bordo de forma gratuita una «pequeña bolsa personal», cuando hasta ahora podían portar una pequeña maleta. Ryanair justifica esta decisión de cobrar por el mismo servicio que ofrecía sin cargo en que la medida contribuirá a reducir retrasos relacionados con el embarque de los pasajeros.

Los pasajeros que abonen 6 euros por el embarque con prioridad podrán ahorrarse 2.