Cementerios que valen su peso en flores

Ana Lorenzo Fernández
L. sarmiento RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Los camposantos de la comarca se engalanaron por el día de Difuntos con decenas de ramos y centros florales

02 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Son lugares muy tristes que han sido regados por miles de lágrimas derramadas por aquellos que se fueron demasiado pronto. Sin embargo, un día al año apartan ese halo de melancolía para convertirse en puntos de encuentro donde las flores se convierten en las auténticas protagonistas. Decenas de ramos y centros decoraban ayer los cementerios de la comarca para celebrar el día de Difuntos, una festividad que atrajo a numerosos vecinos, y que llegó a colapsar las inmediaciones de algunas necrópolis barbanzanas.

Aunque la jornada anterior muchos ya habían aprovechado para limpiar los nichos y colocar los adornos florales, la gran afluencia de personas se concentró en las primeras horas de la mañana. En algunos cementerios, como en Santa Cristina de Barro de Noia, en el de Santa Cruz de A Pobra o en el de Palmeira se llegaron a formar colas de vehículos en los accesos, e incluso en algunos casos tuvo que intervenir la Policía Local y el personal del GAEM de Ribeira para regular el tráfico.

Trajín constante

«Hay que ver qué bonito se ve hoy el cementerio, todo lleno de flores y gente. Debería estar siempre así», comentaba una pobrense a otra a la puerta del camposanto de O Caramiñal. Y es que el trajín fue constante durante todo el día, y pudo haber sido más si la lluvia no hubiera hecho acto de presencia.

En Rianxo, para intentar combatir la oscuridad, además de las numerosas velas que se colocaron en las tumbas, con motivo del día de Difuntos también se instaló una red de alumbrado especial, para que cada nicho tuviera iluminación propia.

Como en toda celebración, tampoco faltaron los puestos de rosquillas y churros, que se colocaron a las puertas de varios camposantos para intentar endulzar este día.