La aportación total de las arcas de los 11 concellos equivale a cerca del 17 % de lo que dedica la Xunta
a toda Galicia
03 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.
Cada vez se pone más de relieve que un importante número de familias necesitan de algún tipo de ayuda que suponga un alivio económico a la hora de garantizar que los jóvenes y pequeños puedan disfrutar de una educación en igualdad de condiciones. En esta línea, los gobiernos locales han ido comprendiendo que las aportaciones autonómicas pueden resultar insuficientes y han apostado por destinar recursos propios. Entre los 11 ayuntamientos de la zona, este curso se destinará un total de 169.000 euros a ayudas al estudio.
Se trata de una inversión importante si se tiene en cuenta que supone el 17 % del cerca de un millón ?952.998 euros? que la Xunta invierte este año en becas para material escolar y comedores. Además, es necesario destacar que se trata de una dotación económica con mayor posibilidad de satisfacer demandas, puesto que la población total de los 11 municipios es de 122.059 vecinos, frente a los 2,7 millones de gallegos.
En líneas generales, y teniendo en cuenta las posibilidades económicas de cada concello, el ámbito al que más fondos municipales se destina es al del servicio de comedor. Los cuatro gobiernos que más aportan a esta área también se corresponden con los que mayores fondos prevén: Noia, Ribeira, Boiro y A Pobra. No obstante, hay sitios donde esta partida no es necesaria, como en Porto do Son, donde todos los centros educativos cuentan con horarios de jornada única.
Diferencias locales
Uno de los casos que más llama la atención es el de Mazaricos, que ha habilitado una nada desdeñable cuantía de 16.000 euros de ayudas para material escolar y transporte, solamente para este curso. El gasto de las familias en traslados es una característica común de municipios de gran dispersión poblacional como Outes y Lousame; por este motivo, sus ejecutivos sufragan billetes de autobús para aquellos alumnos que cursen estudios reglados que no sean impartidos en el término.
A grandes rasgos, la obtención de todas estas ayudas está supeditada siempre a que el perfil de las familias beneficiarias sea de rentas bajas y, en algunos casos, a que no se les haya concedido una beca autonómica. Por este motivo, la vía más frecuente y recomendada para acceder a dichas ayudas se encuentra en los departamentos de Servizos Sociais.
Es más, en casos como el de Carnota, no existe una partida específica y son los técnicos municipales los que estudian la situación de cada familia de forma individualizada.
Outes y Rianxo cuentan con sus propios docentes y planes para combatir el fracaso escolar
Al igual que no todos los concellos cuentan con el mismo tipo de ayudas escolares o a otros estudios ?algunos no destinan fondos a transporte o a comedores?, hay ejecutivos que apuestan por la educación a través de otras vías. Por ejemplo, Outes y Rianxo cuentan con sus propios planes y docentes para combatir el fracaso escolar.
En el caso outiense, la alcaldesa, Beatriz Molinos, explicó que se trata de una iniciativa que lleva varios años en funcionamiento. Durante todo el año, alumnos de primaria y secundaria con dificultades pueden asistir a estas clases de apoyo que imparte una profesional del departamento de Servizos Sociais.
«É un apoio grande e necesario para os rapaces», explicó la regidora sobre esta formación a la que acceden más de una docena de jóvenes. Además, también hay personas que reciben apoyo para lograr el certificado de determinadas competencias clave.
Familias con dificultades
En Rianxo se han habilitado dos líneas dentro de este plan. El primero está dirigido a la obtención del graduado en secundaria y los docentes también se corresponden con profesionales de Servizos Sociais. Además, los chicos reciben el material escolar necesario. La segunda línea está orientada al apoyo escolar de familias con determinados problemas, por la que se crean aulas de apoyo a cargo de voluntarios de la Cruz Roja.
Por otra parte, en Boiro también apuestan por la autonomía y gestión desde los propios centros educativos y por ello destinan un total de 5.000 euros a la realización de actividades en los tres institutos.