La endometriosis afecta a más de dos mil mujeres barbanzanas

Marta Gómez Regenjo
M. Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

SANDRA ALONSO

Se trata de una dolencia inflamatoria, progresiva, de origen desconocido y crónica

07 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La endometriosis es una enfermedad que consiste en el crecimiento de tejido endometrial fuera del útero, pudiendo extenderse incluso fuera de la zona pélvica y afectar a otros órganos más allá de los reproductores, como el intestino e incluso los pulmones. Para la mayoría se trata de una dolencia desconocida, a pesar de que se estima que una de cada diez mujeres en edad fértil la sufren, lo que supone que en la comarca son más de dos mil.

El principal síntoma es un dolor incapacitante, que a menudo se asocia a la menstruación y que, por tanto, con demasiada frecuencia pasa inadvertido porque se considera normal. Es decir, el diagnóstico no es fácil, y eso supone que el retraso medio en poner nombre a la enfermedad sea de ocho años. Por esta razón es difícil saber con certeza el número de afectadas, y además, aunque en algunos hospitales hay consultas especializadas para tratar la endometriosis, que es crónica, no es un servicio extendido al conjunto del sistema sanitario -en el área compostelana no existe-, con lo que no hay datos oficiales sobre las pacientes con esta dolencia. Con todo, diversos estudios sitúan su prevalencia en un 10 % de las mujeres en edad fértil.

Esto supone que en los 11 municipios el área barbanzana hay más de dos mil afectadas, de las que alrededor de 300 sufren formas severas de la dolencia, un aspecto en el que también influye el retaso en el diagnóstico.

Media vida sin saber qué le pasaba

Iria Villar siempre sufrió fuertes dolores menstruales, a los que más tarde se sumaron otros síntomas intestinales. Se pasó media vida sin saber qué era lo que le ocurría, hasta que un día lo supo: tenía endometriosis. Cuenta que cuando se lo explicaron se vio abrumada por sensaciones contradictorias: «Por un lado sentín alivio porque, por fin, sabía que era o que me pasaba despois de tantos anos pensando que a que fallaba era eu. Pero tamén te enfadas por ter que esperar tanto e porque, no meu caso, tiven o diagnóstico e en quince días estaba entrando en quirófano porque xa estaba moi avanzada. E despois está o sentimento de soidade».

Precisamente, esa sensación de verse sola ante algo desconocido fue lo que impulsó el nacimiento de la asociación QuerENDO. «Non tes tempo a dixerir o diagnóstico, non tes información e non tes a quen acudir. En moi pouco tempo tes que tomar moitas decisións importantes e asumir riscos, e non tes a quen preguntarlle. Por iso naceu QuerENDO».

Labor de divulgación

Desde el colectivo trabajan para, por un lado, divulgar una enfermedad que es muy desconocida y, por otro, promover cambios en el sistema sanitario para mejorar la atención a las pacientes.

Villar insiste en la necesidad de crear una unidad multidisciplinar, dado que la endometriosis lleva asociados otros problemas de diversa índole en función del grado de afección. Incide también en la importancia de contar con personal sanitario especializado: «Falta moita formación entre os profesionais. Cunha ecografía e tendo en conta os síntomas, sabendo que preguntarlle ás pacientes, pódese sospeitar dun caso de endometriose. Eu tiven o diagnóstico cando quixen quedar embarazada e tiven que acudir a unha consulta especializada. ¿E se non quixera ser nai? ¿Non tería nunca un diagnóstico?».