La campaña marisquera de Noia se reanudará el lunes al remitir los niveles de toxina

La Voz RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Los análisis enviados a los laboratorios del Intecmar ya constataban el miércoles que la acumulación había bajado, pero se necesitaba otro negativo más

28 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los mariscadores de la cofradía de Noia podrán regresar el próximo lunes a las playas después de que hayan remitido los niveles de toxina amnésica que obligaron a suspender la campaña de forma cautelar el pasado día 19. Finalmente, casi se han cumplido las estimaciones de los responsables del pósito noiés, que esperaban que la marea roja solamente los mantuviera inactivos una semana.

Los análisis enviados a los laboratorios del Intecmar ya constataban el miércoles que la acumulación de toxina había bajado, pero se necesitaba otro negativo más en las pruebas para poder autorizar la reapertura de las playas. Ayer por la tarde se confirmaba la buena noticia, lo que permitirá que el 1 de octubre se pueda volver a retomar la actividad en los arenales noieses.

El secretario de la cofradía, Adelo Freire, explicaba ayer que era una gran noticia que ya se pudiera ir a faenar, aunque aseguró que se seguirán haciendo análisis diarios. «Na ría de Betanzos acaba de aparecer toxina lipofílica e cando xa anda polo norte, é mala cousa porque pode chegar aquí dun día para o outro. Esperemos que non veña e que nos deixe traballar un pouco máis».

Solo cinco días

Finalmente, los mariscadores solamente han estado cinco días sin faenar, un período relativamente corto si se tiene el cuenta lo sucedido en la última campaña, cuando la toxina lipofílica -conocida como la diarreica- prolongó la inactividad durante cerca de cuatro semanas, es decir, prácticamente todo el mes de octubre del 2017. A pesar de ello, la campaña se cerró con un récord de capturas y de facturación, rondando los 19 millones de euros y las tres mil toneladas de producción.

Las perspectivas para este año también auguran un buen balance a juzgar por las cifras que se tienen de los siete días en los que los mariscadores bajaron a los arenales. Más de 2,5 millones de euros de ingresos y casi 323.000 kilos de berberechos y almejas recogidos constatan un buen arranque del curso, que todos esperan que pueda acabar sin registrar ningún otro episodio de marea roja.