Hoy, a las 17.00 horas, recibirá sepultura en el cementerio outiense de San Juan de Roo
19 sep 2018 . Actualizado a las 23:14 h.José Manuel Baña del Río falleció ayer en Santiago y su cuerpo está siendo velado por su amplia familia y amigos en el tanatorio de Boisaca (Santiago). Por la sala 5 han pasado desde ayer muchos de sus antiguos compañeros del colegio La Salle, así como muchos de los alumnos a los que impartió clase.
Hoy, a las 17.00 horas, recibirá sepultura en el cementerio outiense de San Juan de Roo. Baña había nacido el 25 de junio de 1942 en la localidad de Brión de Arriba, donde tenía su refugio y una impresionante colección de pájaros a los que dedicó horas y horas de estudio y atención. Sus alumnos tienen recuerdos de los sonidos de los pájaros y de las lecciones de ornitología, otra de sus pasiones.
Aunque nació en Outes, Baña estuvo vinculado a Santiago desde que, siendo un jovenzuelo casi recién licenciado, comenzó a dar clases en el colegio La Salle, donde permaneció hasta hace 11 años, cuando decidió jubilarse.
Por sus aulas de tercero y cuarto de primaria, y un curso también en quinto, pasaron varias generaciones de chavales, a los que procuró inculcarles los valores de solidaridad. A Baña, como le llamaban sus alumnos y también los padres, le gustaba aclarar que era maestro, no profesor. De hecho, era un docente por vocación y vivió sus años de enseñanza con la misma pasión que el primer día, ya que su entrega y devoción por los estudiantes iba más allá de las aulas. Su mujer, Maricarmen, recordaba que siempre intentaba buscar una solución para ayudar a sus alumnos.