Los carteristas hacen su agosto

Ana Lorenzo Fernández
ana lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil patrullan los mercadillos de paisano para intentar atrapar a los ladrones

09 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El calor no es el único que llega con el verano. Los carteristas también aprovechan la invasión de turistas en la comarca para pasear por los mercadillos y hacer de las suyas. Ayer visitaron el de A Pobra donde, al menos, se llevaron dos carteras. Y pudieron ser más, pero la presencia de agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil, vestidos tanto de paisano como uniformados, impidieron que siguieran actuando.

Lamentablemente, no hubo ninguna detención, «puesto que, como no se lleven más de 400 euros o hayan agredido a la víctima al robarle la cartera, no se considera delito, sino un hurto», explicaron desde la Policía Local de A Pobra, que reconocen que todos los veranos viven la misma situación. Apuntaron que se trata de bandas muy bien organizadas, y que muchas veces una personas es la que sisa la cartera, pero rápidamente se la pasa a otra para no ser descubierta.

Lo más normal es que, una vez que consiguen el dinero, tiren la billetera. «Hoy (por ayer) ya encontramos la documentación de una persona, y lo más curioso es que estaba sin la cartera, parece que esta vez les debió de gustar», apuntaron los agentes pobrenses. Sus homólogos de Rianxo, municipio en el que se celebran mercadillos los miércoles y domingos, también constataron que, durante el verano, «o normal é que haxa dous ou tres casos cada semana».

También en las fiestas

La misma tónica se repite en el resto de la comarca, donde la presencia de carteristas también se ha constatado en la celebración de las fiestas. El jefe de la Policía Local de Ribeira, Pedro Fernández, reconoció que durante las celebraciones de la última semana hubo varias denuncias por robos de carteras.

Además, apuntó que durante el verano también tienen una patrulla en el mercadillo de los sábados para intentar que los amigos de lo ajeno no hagan de las suyas.