Los dirigentes de los pósitos confían en que este episodio remita de manera rápida y sea posible volver a la normalidad
19 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Un episodio de marea roja, detectado la tarde del viernes por el Intecmar, ha trastocado la actividad marisquera en las cofradías de Aguiño, Ribeira y Muros. Los productores aguiñenses son los más afectados, porque la totalidad de la zona uno de la ría de Arousa, que justamente es la que comprende sus concesiones, está cerrada.
El patrón mayor, José Santamaría, explicó ayer que los profesionales se repartían entre la captura de almeja, navaja y percebe. Ahora tienen que concentrar su actividad en el crustáceo, algo que Santamaría considera negativo, porque «cando hai saturación nunha especie, reséntense os prezos». El colectivo empezó a trabajar en el área de Couso. Este es un lugar, precisó el dirigente del pósito, en el que hacía tiempo que no se faenaba.
Por lo que respecta a Ribeira, los navalleiros que estaban trabajando en la zona libre próxima ao Carreiro han tenido que dejarlo. Cabe señalar que, en el caso de la navaja, se trata de un cierre preventivo decretado por Mar.
Por lo que respecta a quienes estaban dedicados a la almeja roja, el presidente de la agrupación, Andrés Martínez, comentó que «está pechado o límite sur da concesión. Había xente que estaba indo a Castiñeiras e ás Eiroas, e agora tiveron que marchar cara as Miñoteiras».
Cambio de zona
El ribeirense Andrés Martínez explica que la cofradía tiene previsto abrir sus bancos de Castiñeiras a partir del 2 de julio: «Aínda falta bastante tempo e agardamos que a toxina remita. No caso de que non sexa así teremos que modificar a nosa programación».
Por ahora, asegura Andrés Martínez, «o cambio non afecta demasiado porque a xente pode traballar noutros emprazamentos. Agardamos que a toxina remita».
Tampoco se han librado en Muros, aunque en este momento no había campaña de la almeja. El patrón mayor, Daniel Formoso, comentó que la actividad se centralizaba en coger en la playa de Virxe do Camiño. Formoso, al igual que los restantes dirigentes de los pósitos de la comarca, confían en que este episodio remita de manera rápida y sea posible volver a la normalidad.