La asamblea rechazó la conversión del Boiro en sociedad anónima

A. Parada RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

La reunión se zanjó con la disolución de la junta gestora y la apertura de un plazo de 15 días para la presentación de candidatos a la directiva

15 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La asamblea de socios del CD Boiro, que tuvo lugar la tarde del miércoles, ha supuesto un punto de inflexión en la historia del club para siempre. Durante dos agotadoras horas, en las que la tensión y el cruce de acusaciones fueron una constante absoluta, se abordaron tres cuestiones esenciales: la crítica situación económica del club, la futura directiva y cuál debería ser el planteamiento de fichajes desde ahora. Pero lo cierto es que no se produjo ni una sola votación en toda la sesión, aunque sí se escuchó una solución al problema que ya venía sonando en pasillos y corrillos, la conversión de la entidad deportiva en una sociedad anónima.

Podría tratarse de cierta justicia poética, pero el mismo día en que Lopetegui era cesado como seleccionador nacional, el expresidente David Places, arropado en un polo con los colores de la rojigualda, ponía punto y final a cualquier tipo de presencia suya en la directiva del Boiro, tras ocho años al cargo del timón. La reunión se zanjó con la disolución de la junta gestora y la apertura de un plazo de 15 días para que se presenten candidatos a la directiva. En caso de que ocurriese, se convocaría una asamblea extraordinaria y se votaría.

Actualmente, no hay nadie al cargo del Boiro, tan solo Roberto Lojo se comprometió a ejercer de enlace entre hipotéticos interesados en optar a la presidencia, pero como socio y sin ningún tipo de vinculación o responsabilidad. No obstante, la ausencia de poder en el palco de Barraña no soluciona el problema.

El baile de cifras

«Todos temos os mesmos dereitos, pero parece que non as mesmas obrigacións», con esta frase, David Places, sembraba uno de los argumentos dominantes durante toda la asamblea, que él ha sido el principal sustento económico del club en caso de necesidad o que cuando le nombraron presidente cogió este con una deuda de 130.000 euros. «A solución máis idónea que vexo é crear unha sociedade anónima, ollo, pero comigo ao marxe», propuso Places. Este era el camino allanado ante la propuesta de que el Boiro pasase a ser de carácter privado, cuestión que recibió el rechazo de un grueso importante de los socios reunidos, al considerar que dicha figura jurídica se le quedaba grande al club en estos duros momentos.

Para poder llegar a este punto, los presentes tuvieron que asistir previamente a una exposición de cuentas del club, que algunos no tardaron en acusar de estar cocinada bajo los intereses del propio David Places. Él mismo advirtió desde el principio que se trataba de los ingresos y gastos desde el 15 de junio del 2017 al 15 del pasado mayo. Según ese período y la versión del expresidente, la deuda se sitúa en 198.439 euros, mientras que habría pendiente de cobro un total 90.101 euros, aunque Places llegó a afirmar que «vin estas contas cinco minutos antes de entrar á asemblea».

En la sala hubo socios que se interesaron por otra deuda de 93.000 euros que aún mantiene el Boiro con la federación, por el descenso del curso pasado, y que en caso de ascender algún día a Segunda B tendrían que abonar. La pregunta se planteó ante el proceso abierto del traspaso de competencias de la Tercera División -donde militaría el Boiro si no lo descienden- de la federación gallega a la española, pues en ese caso tendría que pagar. Hubo quien consideró que los interesados en tomar las riendas del Boiro debían disponer antes de esta información.

El club no podrá tramitar fichas ni renovar licencias si no paga las nóminas antes del día 29 

La gran preocupación en la asamblea fue la cuenta atrás hasta viernes el 29, momento en el que el club deberá pagar las nóminas pendientes a los jugadores que denunciaron a través de la Asociación Española de Futbolistas (AFE) por un total de 101.176 euros. No obstante, desde la junta gestora indicaron que la cantidad real que alegaron es de 93.400 euros, puesto que a algunos boiristas se les habrían dado adelantos.

Independientemente, si el Boiro no paga lo que decida la Comisión Mixta Tercera División-AFE no podrá tramitar fichas, ni renovar licencias, lo que supondría un gran lastre a la hora de confeccionar una plantilla en julio. Mas también se reconoció que si no se remuneran dichas cantidades, a principios de agosto, el Boiro se vería abocado a descender administrativamente.

Entre las ideas que se recogieron en la sesión, se apostó por intentar renegociar la deuda con los jugadores para pagar a plazos y que así retirasen la denuncia antes del día 29 o reducir a la mitad futuros salarios. Places hizo público que cerca de la mitad de la plantilla desea continuar.

Places volvió a cargar contra el Concello al que instó a entregar la subvención

La clave del discurso económico del expresidente David Places pasa por la cantidad pendiente de cobro que atribuye al club, 90.101 euros. Dentro de ese total, se ha señalado que el Concello de Boiro está pendiente de entregar más de 40.000 euros de una subvención que ayer el expresidente volvió a pedir que se entregue lo antes posible, no sin antes cargar contra el Concello.

Sin embargo, cuando estalló el conflicto de los impagos a jugadores y estos amenazaron con hacer una sentada simbólica en el partido frente al Vilalonga del 22 de abril, el regidor Juan José Dieste dejó claro que dicha ayuda económica no podría entregarse hasta que el club justificase gastos por ese valor, pero en un ejercicio anual, es decir de enero a diciembre. El argumento de Places siempre ha sido que, para una entidad deportiva, el año debería computarse desde que se inicia la temporada en septiembre hasta su fin en mayo.

También salió a la luz que en la cuenta corriente del Boiro hay 10.500 euros de otra subvención municipal, que si no justifican en noviembre tendrán que devolver.