La plataforma sanitaria exige un control de las comidas del hospital

Marta Gómez Regenjo
M. Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

Pescado con mal olor e incumplimientos en la dieta de los pacientes son algunas de las quejas reiteradas por los afectados

07 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque ha sido en las últimas semanas cuando las quejas han alcanzado mayor notoriedad, las denuncias por la mala calidad de la comida que se suministra a los pacientes del hospital comarcal no son algo nuevo, según manifestaron ayer miembros de la Plataforma pola Sanidade Pública, que explicaron que tanto usuarios como el personal del complejo sanitario llevan más de un año alertando de la situación. Desde el colectivo exigen al Sergas que realice un control exhaustivo del servicio, tal y como, según apuntaron, recogen los pliegos de adjudicación.

Marián Rodríguez contextualizó un problema que influye de manera importante en la recuperación de los pacientes al señalar que las dietas hospitalarias «deben garantir que un enfermo manteña ou alcance un estado nutricional óptimo» y que «están suxeitas a prescrición médica como parte do tratamento global do paciente en función das súas necesidades». Por eso, la plataforma considera especialmente grave que hasta ahora no se hayan atendido las quejas de los usuarios denunciando el mal olor que, en ocasiones, desprende el pescado o incluso errores en las dietas, proporcionando alimentos ricos en azúcares a diabéticos.

Exigen un mayor control del servicio mediante los mecanismos que establece la concesión y señalan: «Á hora de facer subcontratas, non pode priorizarse o criterio do prezo».

Para protestar por esta cuestión, y por los recortes en general en la sanidad, se ha convocado una concentración el día 13 a las 20.00 horas en Ribeira.

«Unha persoa de 84 anos tense que levantar ás cinco da mañá para ir a diálise a Santiago»

Además de la comida, la plataforma sanitaria tocó ayer otros asuntos que ya están sobre la mesa de los responsables del Sergas, pero para los que piden soluciones inmediatas. Uno de ellos tiene que ver con el servicio de diálisis, que tres días a la semana solo se ofrece en horario de mañana, por lo que media docena de pacientes deben desplazarse a Compostela para el tratamiento. Loli, familiar de uno de los afectados, lamentó esta situación: «Unha persoa de 84 anos tense que levantar ás cinco da mañá para ir a diálise a Santiago e ten que pasar ata as seis da tarde que vén de volta sen comer. ¿Por que ten que ir a Santiago se temos servizo aquí?».