Lira: «Os roxiños» renacen tras el abismo

BARBANZA

JORGE PARRI

El club, que fue colista en Tercera Galicia hace dos años, está a un punto de conseguir la salvación tras ascender

20 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Como el ave fénix, el Lira ha tenido que renacer de sus cenizas. No han pasado ni dos temporadas desde que el club carnotano, una institución que el próximo año cumplirá 40 años, terminó colista en Tercera Galicia. Después del ascenso de la pasada campaña, tiene la permanencia en Segunda Galicia a solo un punto, cuando quedan dos partidos por jugarse. Solo una desgracia, una hecatombe, condenaría a la escuadra de Lombáns.

Fue de la mano de la nueva directiva, que tomó las riendas del club hace dos años, que enderezó el rumbo. «Éramos últimos, non había xogadores e tivemos que sanear as contas. Conseguimos enchufar á xente de novo. No aspecto social e económico foinos ben, na parcela deportiva estamos traballando duro. Este ano contábamos con estar entre os sete primeiros, pero non fomos quen». El que habla es Ángel Gómez, tesorero y una de las personas más involucradas con el proyecto.

El Lira se reforzó a principios de verano. Quería alcanzar la gloria, pero, como Ícaro, quiso subir demasiado rápido para acercarse al sol. «Non calou o proxecto deportivo. A directiva fixo un esforzo e chegou xente con pretensións, con nome, pero que tiña pouco compromiso. Tivemos que ir mudando durante a campaña», afirma Gómez.

Destitución

Como es costumbre en el mundo del deporte, antes de echar a 22 jugadores, se suele prescindir del técnico. El eslabón más débil del Lira, el entrenador Javier González, cayó dejando su hueco a Juan Rey. Es él quien define como ha sido el curso: «Cheguei a finais de novembro co obxectivo de salvar a tempada. E en iso estivemos. Foi complicado, a calidade dos adestramentos non era a correcta. Tivemos que suspender sesións por falta de quórum. Iso calquera equipo o nota, máis que técnico fun aliñador»

Las estadísticas del Lira sorprenden. Está entre los máximos goleadores de la categoría, pero también es uno de los que más tantos encaja. «Iso non é un problema da liña defensiva, é de todo o equipo. Non teñen os conceptos claros, e iso ocorre por non adestrar», asegura el técnico, quien, a pesar de las trabas, ha conseguido que el conjunto esté noveno, aunque amenazado por los dramáticos arrastres.

Dice el refrán que Dios aprieta, pero no ahoga. Y con esa filosofía afronta la directiva del conjunto «roxiño» el próximo curso. «Queremos reestruturar a directiva e manter a xogadores importantes. Temos que crear unha base antes de facer fichaxes de renome. Este ano valeu para aprender dos erros. Vamos corrixindo as cousas que fixemos mal», reconoce Gómez. ¿Quién dijo que sería fácil? El ave fénix también pelea para resucitar.