Tráfico multó a 300 personas durante la cita deportiva

Álvaro Sevilla Gómez
á. SEVILLA RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

17 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Más de un centenar de agentes de la Guardia Civil se dieron cita este fin de semana en Noia y alrededores. Lo hicieron en dos grupos, los destinados a la seguridad ciudadana y los de Tráfico, que se encargaron de dirigir la circulación en los viales externos a los trazados del rali. En total, se pusieron más de 300 multas, la gran mayoría por exceso de velocidad.

«La gente le sigue pisando al acelerador y no solo dentro de los tramos», apuntó uno de los miembros del instituto armado que se encargó de controlar lo que ocurría en Noia y las localidades por las que pasaron los más de 150 coches. A pesar de que tanto la Escudería Berberecho, como la Guardia Civil y el Concello de Noia solicitaron colaboración a los espectadores, no valió de mucho. Fue lo que ocurrió en el tramo Stark, que fue suspendido porque las personas que acudieron a verlo no respetaron las medidas de seguridad que se establecieron.

Según apuntaron desde Tráfico, de las 300 multas, 200 fueron por exceso de velocidad. Este número de sanciones se debe a que los agentes colocaron radares en gran parte de las carreteras que tenían como destino los diferentes tramos del rali. De entre todas las sanciones, hubo diez más por consumo de alcohol y drogas.

El instituto armado también investiga al conductor de una motocicleta sobre el que pesaba una orden judicial por la pérdida de su permiso de conducción. El ciclomotor, además, no contaba con el seguro obligatorio. A pesar de que los funcionarios le dieron el alto, el hombre no paró, lo que obligó a seguirlo por varias vías hasta que lo interceptaron.

Una batalla sin fin

Desde Tráfico volvieron a destacar las consecuencias terribles de circular sobrepasando los límites de velocidad y tras haber consumido estupefacientes y alcohol. Por ejemplo, a lo largo del corredor noiés hubo vehículos que superaron con creces los 150 kilómetros por hora.

«El tráfico seguro por las vías públicas no debe estar reñido con el disfrute y el ocio», apuntó uno de los responsables del equipo que organizó el dispositivo.