Olalla López: «El banco de leche es importante para las madres de los bebés prematuros»

A finales de marzo del 2016 se presentó el banco de leche materno de la gerencia sanitaria compostelana, el primero de Galicia. En estos dos años, ha facilitado la alimentación de 116 neonatos, con donaciones solidarias de 110 mujeres, lo que favoreció el descenso de algunas enfermedades graves y una mejor atención a grandes prematuros, que fueron el 70 % de los bebés que se beneficiaron de este servicio, donde también se promociona la lactancia materna. «La perspectiva que tenemos desde el banco de leche materna es hacer una promoción global de la lactancia. No buscamos solo leche materna donada para pacientes que la necesiten, nuestro objetivo último es que todas las criaturas que nazcan en el Clínico reciban leche de sus propias madres», explica la pediatra Olalla López, que coordina este departamento.

Para lograr esta meta han habilitado una consulta específica, de la que se ocupan la matrona y especialistas en obstetricia y en pediatría. Ahí abordan situaciones de mastitis y otros problemas que se presentan en la madre o en su descendencia. Además, «ofrecemos talleres de lactancia para quienes acaban de dar a luz, de lunes a viernes, en los que la matrona del banco de leche responde a problemas o dudas, sobre todo en los primeros días, que es cuando más se suelen plantear. Tienen una buena acogida y se enseñan además trucos interesantes para lograr el objetivo», sostiene.

Organizan, asimismo, cursos específicos sobre este tema para formar a profesionales de la sanidad pública que estén en contacto con lactantes y con sus madres, para así tener un mismo discurso y poder solucionar bien las dudas e inquietudes sobre el tema.

Objetivo ideal

Con todas estas iniciativas «alcanzamos ya el 65 % y queremos llegar al 70 % de lactancia materna exclusiva, que es lo que se reconoce como objetivo ideal. La cifra es más elevada si se tiene en cuenta la lactancia materna exclusiva combinada con la mixta, pero nos falta información de lo que ocurre cuando las madres dejan el hospital», manifiesta.

Olalla López también quiere aclarar que el tiempo dedicado a darle el pecho a un bebé depende de la madre y del niño, no hay un período establecido. «En nuestra sociedad, cuando la mujer se incorpora a la vida laboral, eso suele ser un problema para mantenerla; y lo vemos también con las madres donantes de leche. Influyen factores laborales, estrés, enfermedades y otras circunstancias. La lactancia materna está muy ligada a factores hormonales y sociales».

Otra consecuencia del trabajo de estos dos años en el banco de leche fue que el Hospital Clínico logró la primera fase de la acreditación de Unicef de la Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactación (IHAN). «Entre los objetivos de este certificado está favorecer la unión madre-hijo, evitar separaciones excesivas y todo aquello que pueda interferir en la adecuada lactancia de un recién nacido. Alcanzaremos la segunda fase de esa acreditación cuando logremos llegar al 70 % de lactancia materna», avanza Olalla.

En el CHUS nacieron en lo que llevamos del 2018 498 criaturas, una cifra inferior a la de años anteriores. Que las madres sean de más edad no influye en la lactancia. Lo importante es el deseo de la mujer, y que cuente con instrumentos y apoyos para lograrlo. «El banco de leche es importante para las madres de los bebés prematuros, que tienen más problemas. Al ofrecerles la posibilidad de recibir la leche materna donada se tranquilizan, se centran en su propia lactancia y la mayoría la consiguen. Los partos prematuros aumentan, porque hay más embarazos por fecundación e in vitro, que los favorece. Desciende la natalidad, pero no los partos prematuros», dice.

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