Las cancelaciones de última hora mantienen en vilo a la hostelería

raquel iglesias RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MATALOBOS

Algunos empresarios ya hablan de los peores resultados en casi dos décadas

28 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Siete borrascas en siete días. Con este panorama los hosteleros de Barbanza han comenzado a cruzar los dedos mirando al cielo. Se esperan lo peor. En la mayoría de los hoteles de la comarca están recibiendo llamadas para cancelar las reservas. Aunque el sector confiaba en mejorar los resultados de la Semana Santa anterior, muchos empresarios ya firman con una ocupación del 50%.

Las previsiones meteorológicas son pesimistas hasta, al menos, mediados de la próxima semana, por lo que un gran número de turistas han decidido cambiar de destino o deshacer las maletas. Tal y como confirmaron desde los establecimientos consultados, muchos de los visitantes se han echado atrás desanimados por la lluvia y al ver que sus planes de disfrutar de las playas y el paisaje se iban a empañar. La tregua de estos días es solo un espejismo y desde algunos negocios ya hablan de los peores resultados en casi dos décadas.

Los hosteleros se agarran ahora a las reservas de última hora, que traerían hasta la comarca a gente que se encuentra de paso para visitar otros puntos de Galicia. Se conforman con arañar algunas solicitudes de este tipo y que las cancelaciones cesen.

Descuentos en las tarifas

Aunque la mayoría de los empresarios de la zona apuestan por mantener los precios en Semana Santa, pese a ser temporada alta, algunos van más allá y se han atrevido a ofrecer descuentos. En el hotel MS de Boiro rebajan las tarifas desde mañana hasta el domingo. En concreto, se reduce en 7 euros, y una habitación con el desayuno incluido rondaría los 50. El responsable del negocio asegura que la ocupación llegará al 70 %, si bien no cuenta con reservas de última hora por el mal tiempo.

No es la tónica general, pero algunas casas de turismo rural sí que están salvando los muebles e, incluso, prevén colgar el cartel de completo. Ocurre en la de Os Muiños, en Rianxo, donde las vísperas de los festivos ya funcionaron al 70%. En otras se resignan y confían en que el verano traiga mejores resultados.