Las ayudas a jóvenes animan el mercado inmobiliario en Barbanza

raquel iglesias RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MATALOBOS

El nuevo Plan Estatal de Vivienda favorecerá la compra de pisos en tres municipios

13 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los jóvenes vuelven a querer ser propietarios. El mercado inmobiliario se aviva en Barbanza y las empresas dedicadas a la venta de viviendas auguran un buen año. Las ayudas parecen estar animando las compras, y es que los beneficios fiscales que poseen los menores de 35 años por las transmisiones patrimoniales no son baladí. A todo ello hay que sumar ahora las ventajas del nuevo Plan Estatal de Vivienda 2018-2021, aprobado la semana pasada por el Consejo de Ministros. Tres serán los municipios barbanzanos que se verán favorecidos por tener menos de 5.000 habitantes. Se trata de Carnota, Mazaricos y Lousame. La idea del Gobierno es facilitar la implantación, tanto en régimen de alquiler como de compra, en las zonas afectadas por la despoblación. En la primera de las localidades ya se nota un mayor interés, siguiendo la tendencia ascendente de los últimos años.

Tal y como se especifica desde el Ministerio de Fomento, para acceder a las ayudas para la adquisición de viviendas es necesario cumplir requisitos como que se destine a un uso habitual y permanente, que el precio sea inferior a 100.000 euros, y que los ingresos en la unidad de convivencia sean menores a tres veces el Iprem, indicador de referencia para la concesión de este tipo de subvenciones. En su afán por facilitar el asentamiento de jóvenes en zonas rurales, el Gobierno también ofrece bonificaciones para el alquiler, asimismo con la condición de que se trate de la vivienda habitual del solicitante.

Hasta 900 euros

Esta ayuda se podrá pedir para el arrendamiento de pisos con rentas mensuales de hasta 900 euros. Cabe destacar que con el anterior plan el límite estaba en 600, pero se ha tenido en cuenta la burbuja del alquiler de los últimos tiempos.

En la comarca son ocho los concellos que se han visto olvidados en el nuevo plan estatal al superar los 5.000 habitantes. En Galicia, la nueva ayuda a jóvenes deja fuera a más de un centenar de ayuntamientos, que no podrán tener acceso a las ayudas.

Lo dicen la mayoría de los agentes inmobiliarios: es buen momento para comprar vivienda, aunque no tan bueno para vender. Los jóvenes de la comarca se animan por la bajada de los precios -se ha notado un descenso en los últimos años- y los beneficios fiscales que conlleva tener menos de 35 años. Juan José Pazó, profesional de una agencia inmobiliaria de la zona de Muros, asegura que el aumento en las ventas comenzó a notarse con fuerza el año pasado y la tendencia se mantiene: «La causa no es que haya más trabajo, sino que mucha gente prefiere comprar aquí aunque tenga que desplazarse a trabajar a otros puntos como Santiago. El precio de un piso de tres habitaciones ronda los 130.000 euros, y de dos ya los hay por 70.000».

Aunque Muros es una zona turística que recibe miles de visitantes cada año, Pazó afirma que la mayoría de las compras son para vivienda habitual, y augura buenos resultados para los próximos meses: «El 40 % de nuestras ventas ya son a menores de 35».

Los jóvenes están perdiendo el miedo a comprar, aunque no a cualquier precio. Lo saben bien en las inmobiliarias de la zona, donde constatan que la vivienda de segunda mano o aquellas que proceden del Sareb son las más demandadas por los menores de 35 años. Y es que muchos prefieren guardar algunos ahorros por si vienen mal dadas antes que invertirlo todo en un hogar.

Alfonso Gago, agente inmobiliario en Barbanza, afirma que se están produciendo más ventas, también gracias a las entidades financieras: «Se nota más alegría porque los bancos también abrieron el grifo».

Con respecto al tipo de vivienda que prefieren los nuevos compradores, Gago señala que son aquellas de tres habitaciones y dos baños, y que si se trata de un piso que necesita algún tipo de reforma, el precio suele oscilar entre 100.000 y 120.000 euros.