El futuro de dos unitarias y un CEIP pende de un hilo por la baja matrícula

a. parada RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

A ocho días para que finalice el plazo, varios centros no llegan al mínimo de alumnos

11 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Todos los cursos, a esta altura del año, una nube de incertidumbre se posa sobre un número importante de centros educativos de la comarca, como son los colegios y escuelas infantiles herederas de las antiguas unitarias, es decir, aquellas que cuentan con pocas clases y agrupan a chicos de distintas edades en la misma aulas. El acuciante descenso de la natalidad ha venido haciendo mella en el índice de matriculaciones de estos centros, localizados en zonas alejadas de los núcleos urbanos, como algunas parroquias. A falta de ocho días para que se cierre el plazo de matriculación del futuro curso, dos escuelas unitarias se arriesgan a perder sendas unidades, mientras que un colegio podría ver desaparecer la única de la que dispone, abocándose a su cierre. El futuro se presenta incierto.

Los parámetros que establece la Consellería de Educación para mantener una clase implican que debe tener al menos seis alumnos. Los centros que pueden dejar de contar con una unidad se corresponden con la EEI da Angustia, en A Pobra, así como una de las ocho sedes que componen el CRA de Rianxo; mientras que en el CEIP Pazos-Comoxo de Boiro peligra la única clase mixta en funcionamiento.

Los casos

«A consellería apoia o modelo dos centros rurais agrupados e aposta por el investindo recursos, por iso é máis difícil que se peche unha clase estando conformados deste xeito», explica Tobías Betanzos, director del CRA de Rianxo, uno de los más grandes de toda la provincia. «Andamos xustiños nalgunha unidade, pero temos a previsión de que lograremos mantelas todas, pero ata que a matrícula non se complete existe o temor», concretó Betanzos para indicar que están al límite para completar un aula.

«Non deberían quitarnos nada, ao ser unha unitaria con 18 alumnos de idades e necesidades distintas, sería unha marcha atrás», indicaron desde la EEI da Angustia, que teme perder una clase de las dos de que dispone y con ella un docente, en base a sus previsiones de matriculación. Lo cierto es que su situación sería complicada, ya que solo por dos niños -el mínimo para disponer de dos unidades es de 20 alumnos- verían mermados sus recursos drásticamente.

«Se suprimen a unidade, suprimen o colexio enteiro, de momento este ano marchan tres rapaces e só rexistramos unha matrícula, pero aínda faltan algúns días para que peche o prazo», precisaron fuentes de la comunidad educativa del colegio de Comoxo, destacando que los padres no comprenderían un hipotético cierre, a razón de la calidad educativa con la que cuentan sus pequeños. Aún así, desde este centro boirense se muestran optimistas, como cada curso en estas fechas.

Las campañas informativas y el boca a boca entre familias ayudan a la llegada de niños

Las campañas informativas se han vuelto indispensables para fomentar la matriculación de nuevos pequeños en unitarias. Un ejemplo de este tipo de acción es la que desarrollan desde el CRA de Rianxo, donde han creado vídeos promocionales y realizan numerosas actividades extraescolares o proyectos educativos, como el Club de Ciencia, que les convierte en el único centro rural agrupado de toda Galicia en tenerlo.

El boca a boca, que suelen protagonizar los propios padres para animar a otros a que matriculen a sus hijos cerca de casa, funciona en casi todas estas escuelas. Este método garantizó que la pobrense EEI de A Granxa pasase de estar al borde del cierre a crecer por segundo año consecutivo.

La comunidad del colegio de Louro critica la carencia de recursos tras perder tres profesores

 En el muradano CEIP de Louro no temen una futura pérdida de unidades porque este curso lo empezaron con dos menos en el nivel de primaria, lo que se tradujo en la reducción de dos profesores, así como de un tercero en Educación Física, que ya compartían con otro centro.

«De 57 rapaces pasamos a 46, non foi unha barbaridade comparada con outros anos. Imos protestar e enviar escritos, porque necesitamos polo menos un docente máis», expresaron desde la dirección del colegio.

Un modelo de enseñanza a proteger (Sálvora)

El argumento economicista de que es inviable mantener centros con pocos alumnos puede ser racional, pero peligroso. Pocos lo aceptarían en cuestiones similares, como la desaparición de centros de salud en parroquias, dinámica que solo favorece la pérdida poblacional en entornos rurales. Y es necesario destacar la riqueza del aprendizaje con la que cuentan los jóvenes de escuelas unitarias, con énfasis en la atención individualizada, y que concuerda con las metodologías educativas más modernas.