Aparcamientos y transporte público, dos de las prioridades de actuación
La necesidad de ofertar a los ciudadanos alternativas de aparcamiento público estuvo presente en todas las intervenciones, pero de manera especial en las del presidente de los empresarios, Antonio Miranda, y del regidor, Manuel Ruiz. El dirigente de la patronal aseguró que es imprescindible disponer de áreas de estacionamiento porque, señaló, «o coche é algo que convive con nós e a súa retirada debe facerse de xeito paulatino». Asimismo, habló sobre la necesidad de impulsar el transporte público y de sensibilizar sobre su uso. El alcalde coincidió en estas afirmaciones y subrayó que en los últimos años se han creado unas 500 plazas de aparcamientos de proximidad en O Monumento, Abesadas y Agustín Fernández Oujo. Añadió que, en breve, se incorporará otro espacio y que se habilitarán estacionamientos exprés de 15 minutos. En cuanto al transporte público, dijo que Ribeira será el único concello gallego no adscrito a un área metropolitana en el que se bonifique de forma generalizada el transporte urbano. Asimismo, se refirió a la mejora de la accesibilidad.
Los arquitectos incidieron en la adecuación de los espacios urbanos
Los arquitectos Carlos Fernández Coto y Manuel Rodríguez pusieron el acento en que la peatonalización es insuficiente sin una adecuación de los espacios urbanos. En este sentido, Fernández Coto recalcó que cualquier medida de humanización debe implicar la rehabilitación de edificios y un cuidado por el ornato público. Aseguró que una calle en la que los inmuebles presentan un mal estado no consigue el efecto de dinamización deseado, y matizó que se trata de algo básico para «conseguir o apego das persoas pola súa cidade, o sentido de pertenza». Similar fue la argumentación de Manuel Rodríguez, quien indicó que la investigación que ha realizado la Fundación Ría pone de manifiesto que, en el caso de Ribeira, se produjo un desarrollo urbanístico en los años 60 y 70 que provocó la destrucción de gran parte de los edificios de interés histórico. Bajo su punto de vista, esto se traduce en «unha alienación do entorno urbano, unha perda de identidade que contribúe á ausencia do atractivo residencial».