Nuevo robo en un barco de Ribeira, del que se llevaron tres ordenadores

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

cedida

Usuarios del puerto se quejan de la falta de seguridad y señalan que la sustracción de herramientas o equipos es frecuente

21 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los ladrones volvieron a actuar en el puerto de Ribeira y, esta vez, el objetivo fue un palangrero de fondo, el Madre Pilar, del que se llevaron cuatro ordenadores portátiles. Uno de ellos fue recuperado, ya que agentes de la Policía Nacional lo encontraron en el interior de una bolsa que apareció tirada, según indicó el armador, Manuel Gude. Las otras tres computadoras se utilizan para la actividad de navegación del barco. Una de ellas es el diario electrónico de pesca con el que deben estar equipadas las embarcaciones.

Para entrar en el puente de mando, los delincuentes rompieron un cristal y, además, destrozaron las puertas, que deberán ser sustituidas. Manuel Gude manifestó que el palangrero, atracado en las inmediaciones de la fábrica de hielo, está parado en este momento, pero subrayó el trastorno y el desembolso económico que supone el robo que ha sufrido.

Hace una semana también se registró un suceso similar en otro barco, del que se llevaron una televisión y unas botas.

Usuarios del puerto se quejaron de la falta de medidas de seguridad y señalaron que la sustracción de herramientas o de equipos es bastante frecuente tanto dentro de las embarcaciones como útiles que se encuentran en el exterior.

Fuentes de Portos de Galicia indicaron que su competencia en la zona es la relativa a la actividad portuaria, pero no en lo que atañe a las cuestiones de vigilancia fuera de ese ámbito. Según explicaron, eso depende de las fuerzas del orden, como en cualquier otra zona de la ciudad.

Los camiones

Por otro lado, el armador Manuel Gude expresó su malestar por el hecho de que los camiones aparquen frente a la zona en la que están atracados los barcos.

Manifestó que se trata de una queja que en anteriores ocasiones ya ha transmitido al personal de Portos en la localidad, sin que hasta el momento se haya adoptado ninguna medida. Bajo su punto de vista, el hecho de que los vehículos estén delante de los barcos facilita la actividad de los cacos porque resulta más difícil que puedan ser vistos.

Además, señala que, en algunas ocasiones, la colocación de los tráileres dificulta que puedan cargarse pertrechos en las embarcaciones. Manuel Gude, quien solicita mayor vigilancia en el muelle, indica que esta situación no se registra en otros puertos en los que trabaja y cree que debería controlarse el aparcamiento de los camiones.