Los patrones mayores de las cofradías del norte de la ría arousana reclaman mayor vigilancia para evitar la acción de los furtivos cuando no se faena en los bancos y para controlar que todos los profesionales con permiso cogen los topes autorizados y del tamaño reglamentario durante la campaña.
Especialmente duro con esta cuestión se muestra el dirigente del pósito de A Pobra, Juan Miguel Iglesias, quien subraya que la Consellería do Mar, que se ocupa de la gestión de estas zonas productivas, debe evitar que sean esquilmadas.
Integrantes de las entidades marineras se encargan de los controles mientras hay actividad extractiva, pero algunas cofradías afirman que les resulta difícil mandar a personal para desempeñar esta actividad.
La mala situación por la que atraviesan estas áreas productivas también genera gran preocupación al dirigente de Rianxo, Miguel Ángel Iglesias, que es uno de los principales impulsores para evitar que las capturas vayan en descenso, y que considera que pósitos y Administración deben implicarse.