Boiro es el municipio que ha registrado el mayor aumento de la comarca, al producirse un incremento de 351 actuaciones
15 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El correcto cuidado y adecuación de nuestros bosques y la lucha contra los incendios son tareas que requieren de cierta labor de pedagogía en la sociedad. Es difícil hallar un indicador claro de que se ha avanzado en esta materia, pero hay cifras que apuntan a que se ha producido una mejoría respecto del pasado. En ese sentido, el número de talas de árboles en los bosques y fincas forestales de la comarca ha aumentado en cerca de un millar -concretamente, en 699- durante el pasado año.
Por otra parte, este crecimiento ha sido considerable en algunos municipios barbanzanos, como es el caso de Boiro, que ha registrado la mayor subida de todas, con un total de 764 actuaciones realizadas en su territorio, 351 más que en el 2016. Se trata de datos que han sido facilitados por la Consellería de Medio de Rural.
Los permisos
Hace dos años, el cómputo de talas registradas en la comarca alcanzó un total de 2.484 frente a las 3.184 del 2017. No obstante, dentro de estos datos generales se esconden otros relevantes como es el del medio por el que se consiguió permiso, o se avisó, para realizar las actuaciones. Desde la Xunta precisan que existen varios métodos según el carácter de la finca forestal.
Si tiene finalidad doméstica y se trata de una extensión menor a 10 metros cúbicos solo será necesario realizar una comunicación a la Xefatura Territorial de Medio Rural. Si se trata de una tala mayor, en la que haya pinos o eucaliptos, habrá que pedir autorización a este organismo y tras recibirlo se contará con un permiso de 15 días. En el mismo caso, pero con variedades frondosas, se seguirá igual procedimiento con un plazo de un mes. Por último, si el monte tiene proyecto de ordenación bastará con una notificación.
De esta forma, la mayor parte de las talas realizadas en la comarca precisaron de una tramitación para obtener el permiso -cerca de dos millares-, mientras que las comunicaciones alcanzaron una cifra de 1.700. En el 2016 se repitió esta dinámica, también con una diferencia de cerca de 200 autorizaciones más que comunicaciones.
El municipio en el que menos talas forestales tuvieron lugar fue el mismo en los dos últimos años y se corresponde con Carnota.
Franja de protección
El principal factor que ha podido desencadenar dicho aumento de las talas en Barbanza pasa por la reciente normativa de la Xunta que obliga a los propietarios de terrenos con árboles a establecer una franja de protección, libre de pinos y eucaliptos, ante posibles incendios.