Miami pondrá fecha al pasado barbanzano

A. parada RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Los diversos vestigios arqueológicos que los expertos hallaron el año pasado serán datados por una prestigiosa firma

13 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Si en algún aspecto sociocultural ha destacado la comarca en el último lustro, este es sin duda alguna el campo de la arqueología. Los descubrimientos realizados por el Grupo de Estudos para a Prehistoria do Noroeste Ibérico (GEPN) en Boiro -en los yacimientos de río Barbanza, Chans do Cerqueiro y Coto do Espiño- o en el monte de A Curota -Folgoso Vello- han sacado a la luz cifras demoledoras de miles de vestigios, pero ¿qué pasa con ellos una vez que finaliza la intervención y la tierra vuelve a su lugar? Pues lo cierto es que los fragmentos de piedra, carbón y restos de cerámica tienen un billete de ida y vuelta a Miami, concretamente, al laboratorio Beta Analytic.

Esta prestigiosa firma, que destaca por sus precisas dataciones mediante radiocarbono, se encargará de poner fecha a los hallazgos más recientes. El GEPN, organismo dependiente de la Universidade de Santiago de Compostela, tiene previsto realizar el envío a lo largo de la próxima semana. 

Los pasos

El arqueólogo Carlos Rellán, a cargo de las intervenciones realizadas en Boiro y A Curota, explicó que la empresa estadounidense trabaja relativamente rápido y que en un período de cerca de 15 días podrían obtener las primeras aproximaciones cronológicas. Sin embargo, eso no quiere decir que a lo largo de este mes vayan a resolverse todas las incógnitas planteadas. Esta espera se prolongará como mínimo hasta el 2019, ya que los expertos se encuentran actualmente en fase de estudio y documentación, un estadio que comprende la catalogación de cada uno de los grupos de piezas descubiertas, así como el desarrollo de las hipótesis.

Una vez que se obtengan las fechas de Beta Analytic, estas deberán pasar por un nuevo y minucioso proceso de estudio hasta que se alcance un veredicto final sobre el pasado del yacimiento del que fueron extraídos los restos, una meta que aún podría abarcar más tiempo. En ese sentido, hay que tener en cuenta que aún están en curso algunas investigaciones iniciadas hace más de cuatro años en la comarca.

Las reducidas muestras de Chans do Cerqueiro y Folgoso Vello que se enviarán a Estados Unidos han sido seleccionadas por su potencial a la hora de ofrecer una datación sin distorsiones porque, por ejemplo, se hallasen protegidas en el interior de una estructura o se trate de cerámicas con rasgos identificativos claros.

En el primer caso se busca determinar si ese punto funcionó como un centro de producción de puntas de flecha en el tercer milenio antes de Cristo, mientras que en el caso de A Curota se trata de dilucidar si el curro descubierto se encuadra en el período medieval. De confirmarse ambos supuestos, la teoría de la ocupación humana estable en la sierra barbanzana a lo largo del tiempo, que propone el GEPN, se reforzaría y recibiría un nuevo impulso.

El laboratorio también recibirá las muestras del análisis paleoambiental

Otro de los trabajos que se han venido realizando de forma paralela a las intervenciones arqueológicas, y que sigue en curso, se corresponde con la elaboración de un análisis paleoambiental tomando como objeto diversos puntos geográficos de Barbanza. Este estudio tiene como finalidad lograr una recreación de las condiciones del entorno en el pasado, a través de indicadores como la vegetación, el clima o el terreno y observar su evolución. Por ejemplo, en el yacimiento de Folgoso Vello se han recogido dos muestras y en Porto Traveso, una. Aún no hay una fecha determinada para conocer los avances de este proyecto, que permitirá, entre otras cosas, analizar la variabilidad de los valles boirenses.

Los yacimientos boirenses serán los protagonistas del 2018 (Análisis)

Hay dos factores que condicionan los tiempos y la selección de yacimientos a intervenir para el Grupo de Estudos para a Prehistoria do Noroeste Ibérico (GEPN). Se trata de la financiación y de los procesos para actuar en un enclave, que dependen de proyectos que se programan para varios años y que son limitados.

Folgoso Vello

El potencial de A Curota deberá esperar. Tras la primera intervención arqueológica realizada en A Curota se ha puesto de relieve el potencial con el que cuenta esta zona, en la que ya se han identificado yacimientos al lado mismo de los intervenidos el año pasado. Los únicos avances posibles serán los que lleguen a través de la datación realizada en el laboratorio. 

Chans do Cerqueiro

La investigación continuará en Moimenta. Uno de los puntos más interesantes para los arqueólogos volverá a contar con una nueva actuación. Es necesario destacar que apenas se ha explorado una minúscula parte de una extensión de, como mínimo, una hectárea y media en la que se cree que hay numerosas estructuras domésticas y más puntas de flecha.

Coto do Espiño

El misterio por resolver en la cima. Al lado del anterior yacimiento, pero separados por un milenio, se localiza este punto elevado en el que se halló un castro formado por dos cabañas. Todavía está pendiente de concretarse cuál fue el uso de estos espacios, así como comprobar si la datación de una muralla milenaria encontrada se corresponde con la de esas construcciones.

Serra do Barbanza

Por concretar. Otra zona que está conformada por diversos puntos que abarcan distintas cronologías (de la Prehistoria a la Edad Media) y de la que no ha trascendido cual será el próximo yacimiento a excavar.

A Miserela

Pendiente de resultados. El estudio de Ezequiel Lago en el eremitorio pobrense del río Pedras continúa en desarrollo.