A pesar de las críticas y comentarios que se realizaron tras la marcha del técnico, la asamblea del club transcurrió sin sobresaltos
11 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Después de que la marcha de José Luis Lemos generara mucho ruido en Boiro, la asamblea que celebró el club en la noche del martes se preveía tensa. No fue así, y los socios y aficionados que acudieron a la reunión escucharon primero a la junta gestora y luego plantearon sus dudas sin levantar la voz. Por supuesto, el tema que más tiempo ocupó fue la salida del entrenador. En este punto, David Places aseguró que «terá as súas consecuencias».
El directivo indicó que «si quería irse tería que comunicárnolo con 15 días de antelación, como marca a lei. Non pode ser que dean as sete da tarde, eu non saiba nada, e logo reciba unha mensaxe desde as oficinas do club dicindo que o adestrador vaise». Por ello, el Boiro le va a reclamar al técnico «certa cantidade, e oxalá non quedemos a tres puntos da promoción, porque no último partido el tiña que estar no banco. Nós tamén temos dereitos e non só obrigas, porque el firmou un contrato polo que se comprometeu toda a tempada».
Evitar problemas
David Places explicó que «intentei convencelo para que non se despedira dos xogadores. Buscaba solucionar problemas e non acrecentalos». En este sentido, también declaró que, por eso, en el comunicado oficial, el Boiro puso que la salida de Lemos había sido consensuada: «Esta forma que el escolleu non me parece a máis adecuada. Quixen quitarlle ferro ao asunto. Mentín polo ben do club».
Por todo ello, Places resaltó que «váiselle reclamar todo o que se lle poida reclamar, que é bastante. Se quere seguir por este camiño, perfecto. Este é un club máis serio do que el pensa».
Inicio complicado
La temporada pasada no concluyó para el Boiro el 30 de junio. Al inicio de esta campaña aún quedaban cosas por resolver, y eso provocó que «a primeira recadación tivera que usarse para cubrir parte do que se arrastrou do ano anterior. Por exemplo, pagar aos xogadores que non denunciaron e ao corpo técnico», aclaró David Places.
Este, según el directivo, fue el motivo por el que la plantilla «no primero mes, en vez de cobrar o día 10 o fixo o 20». Esta explicación la dio después de que un asistente a la asamblea preguntara si la entidad tendrá dificultades para abonar las nóminas durante esta temporada. Places volvió a ser contundente al contestar que «o club non vai a ter problemas».
Otra de las cuestiones que se puso sobre la mesa fue la continuidad de los futbolistas, tras las marchas de Diego Abad y Diego Vieytes. En los dos casos se esgrimieron motivos personales, pero Vieytes lanzó a través de las redes sociales un mensaje en el que agradecía el apoyo de la afición y de los compañeros, a la vez que criticaba a la directiva por su actitud y por el retraso en el pago de los salarios.
En este caso, David Places indicó que el Boiro no tiene pensado darle de baja a más jugadores. Aún así, habrá que esperar a que se incorpore el nuevo técnico y diga si no quiere que continúe algún miembro de la plantilla.
Roberto Lojo se pone al frente de la junta gestora del Boiro
Un David Places que manifestó no sentirse con ánimos para seguir al frente de la junta gestora que dirige el Boiro, anunció que su puesto lo ocupará Roberto Lojo. Places afirmó que «non quero ser un problema e o mellor para o club é que me aparte da primeira liña». Aún así, indicó que continuará trabajando y llevará personalmente la reclamación a la federación española por la plaza en Segunda B y la que se realizará sobre Lemos por dimitir sin avisar con 15 días de antelación. Lojo, por su parte, pidió colaboración y ofreció diálogo.