El 70 % del berberecho gallego se extrae en la ría de Muros-Noia

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

La producción en lo que va de año supera ya los dos millones de kilogramos

24 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de que el parásito de la marteilia acabase con las poblaciones de berberecho en las concesiones marisqueras de Arousa, la ría de Muros-Noia se convirtió en la mayor reserva de este bivalvo, alcanzando una situación de hegemonía que va a más cada año. En la actualidad, de esos fértiles bancos se extrae el 72 % del total de Galicia, sin que ninguna otra zona le haga ni siquiera sombra.

Desde que comenzó el año, y teniendo en cuenta que las autorizaciones que administra el pósito noiés estuvieron cerradas entre abril y mediados de septiembre, los productores han traído a tierra dos millones de kilos de esta especie.

A esta cantidad hay que sumar los 70.000 capturados en verano, tanto en los bancos que gestiona la cofradía de Muros como en los de libre marisqueo que hay en la zona. Cabe destacar el importante incremento experimentado en las ventas de la lonja muradana, ya que el volumen de kilos prácticamente se ha duplicado con respecto al año pasado y supera al de áreas como la del río Anllóns, en la Costa da Morte. Según indicaron fuentes del pósito, la zona de Esteiro fue la de mayor productividad.

Importante aumento

También los datos noieses son mucho mejores que los del 2016, mientras que los de cofradías como la de Carril, donde se subasta una importante cantidad de berberecho, han experimentado un receso bastante considerable. De los cerca de 500.000 kilogramos del 2016 se ha caído hasta los 209.000.

La suma de estos factores motiva que la ría de Muros-Noia pasase de representar, en el ejercicio anterior, el 50 % de la producción total de berberecho de Galicia a situarse ahora en el 72 %.

Cuando se le pregunta a la presidenta del colectivo de a pie, Dominica Fernández, sobre los buenos datos afirma: «A dinámica de traballo da confraría ten moito que ver. O prolongado peche que facemos permite que o marisco desove, que poida medrar». En cuanto a la campaña de este año, reconoce que «está saíndo moito bivalvo».

La talla mínima para coger el marisco es mayor que la de otros pósitos

Además del exhaustivo control que durante todo el año se efectúa sobre los bancos marisqueros, el pósito noiés también tiene otras normas que buscan la preservación del bivalvo. Por ejemplo, la talla mínima establecida es de 28 milímetros, cuando otras cofradías la tienen en 26. También el raño que utilizan los productores, de 20 milímetros, comentan desde la entidad, tiene por objeto que no se extraigan ejemplares demasiado pequeños.

A esto hay que sumar las constantes siembras. A las que se hacen en verano, se añaden las que se realizan de forma diaria con el berberecho que, debido a su tamaño, no pasa los controles de las máquinas clasificadoras.

Siembra diaria

El patrón mayor, Santiago Freire, explica que, en la actualidad, unos 1.000 kilogramos se devuelven al mar cada jornada. La cifra va aumentando a medida que transcurre la campaña. Así, en los días iniciales, la cantidad suele ser de un centenar de kilos, ya que los productores cogen las piezas más grandes. En noviembre ya se elevó hasta los 300.