La cobertura de la red móvil 4G se ha duplicado en menos de dos años

A. PARADA RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

La mayor implantación ha tenido lugar en Outes, Muros, Carnota y Mazaricos

04 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La extensión del modelo de cobertura de telefonía móvil 4G, basada en la combinación de redes de cable con las inalámbricas, se ha convertido en una necesidad primaria de la sociedad ante la proliferación y el avance imparable de los smarthphones y de la dependencia tecnológica. Pero, ¿cuál es su grado de implantación en la comarca? Si se realiza una radiografía de la situación de esta en febrero del 2016 y se contrapone con la de noviembre del 2017, la realidad es que la cobertura se ha duplicado en cerca de dos años, según datos del Ministerio de Industria, cruzados con los de la firma OpenSignal.

No obstante, y en sintonía con el escenario anterior, esta ampliación del rango de velocidades de entre 100 megabits por segundo y 1 gigabit en reposo, ha vuelto a producirse de forma desigual. La principal variación se ha producido en las zonas de Muros, Outes, Carnota y Mazaricos. Se trata de los municipios donde más nuevas áreas cuentan por primera vez con la cobertura 4G. Sin embargo, si se tienen en cuenta los lugares donde más se ha visto reforzada la red existente, los líderes vuelven a ser los municipios barbanzanos, con Ribeira, A Pobra y Boiro a la cabeza.

Análisis del aumento

La llegada del 4G a nuevos espacios se ha circunscrito, fundamentalmente, a la línea costera de la ría de Muros-Noia. Podría decirse que, en los últimos años, se ha logrado unir esa recta imaginaria, lo que ha supuesto dotar de conexión a lugares como Cruceiro de Roo y O Freixo, en Outes, o a Abelleira y Louro, en el término muradano.

La irrupción de esta red en Carnota ha sido exponencial, sobre todo en A Gándara, Lariño, Lira y Sofán. En estos dos últimos puntos lo que se ha incrementado fue la velocidad. Además, ya existe una conexión estable desde Caldebarcos y Quilmas a O Pindo. Aún así, tanto en Outes y Muros como en Carnota, el servicio 4G solo está disponible en las áreas próximas a la carretera y a la mencionada línea costera, ambas de una mayor densidad demográfica.

En el concello sonense ya se navega de manera continuada, pero presentando distintos picos de velocidades, en Xuño, Queiruga, Porto do Son y Portosín. Aunque es necesario destacar que esta red se focaliza en los núcleos poblacionales, ya que a medida que se desplaza al interior se vuelve inexistente.

Por su parte, en Noia la implantación en nuevos espacios no ha sido sustancial, pero sí el refuerzo en el casco histórico y en las zonas próximas al centro, puesto que han aumentado las velocidades de las que se disponía en el pasado. Un caso similar es el que se ha registrado en Ribeira, A Pobra y Boiro, donde más se han fortalecido las redes 4G existentes, con la diferencia de que en el municipio ribeirense la cobertura se ha extendido a Corrubedo, Bretal y Axeitos.