Cerca de 800 personas no dudaron a sumarse a la comida, que este año cumple la mayoría de edad
25 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.«Juventud, divino tesoro». La famosa frase de Rubén Darío quedó ayer vacía de contenido durante la celebración de la comida de confraternidad de la tercera edad de A Pobra, donde la directora xeral de Maiores, Fabiola García, quiso desdecir al poeta nicaragüense «porque os maiores galegos, e sobre todo os maiores do Barbanza, son un gran tesouro». La representante autonómica se deshizo en elogios hacia unas personas que «son a memoria de Galicia, a experiencia, a sabedoría, un símbolo do esforzo e un exemplo de dignidade da terra, de como saber camiñar pola terra e polo mundo».
También el alcalde pobrense, Xosé Lois Piñeiro, y el concejal Miguel Alamancos agradecieron la alta participación en esta cita, aunque según confesó este último, al principio era un poco escéptico sobre su celebración. «Teño que recoñecer que estaba equivocado. Toda a xente que veu preguntar por esta celebración fíxome ver que este é un acto que hai que facer e que nunca se debe perder», destacó Alamancos.
Hasta Holanda
Cerca de 800 personas no dudaron a sumarse a la comida, que este año cumple la mayoría de edad, y en la que pudieron degustar un sabroso menú elaborado por Chicolino a base de buey y langostinos, merluza, ternera asada y tarta de Santiago. Muchos no dudaron en inmortalizar el evento con numerosas fotografías, «que le voy a mandar a mis hijos en Holanda para que me vean», afirmaba un asistente, que al igual que la mayoría, repetía asistencia un año más en compañía de sus amigos.