El renovado colegio de A Serra abrió sus puertas para mostrar el cambio

J. M. Sande OUTES / CORRESPONSAL

BARBANZA

SABDE

Los progenitores formularon propuestas y demandas para mejorar las remozadas instalaciones

15 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los padres de los alumnos del CEIP de A Serra acudieron masivamente a la convocatoria del centro para conocer el estado en que quedaron las instalaciones educativas del colegio, una vez que este sufrió una remodelación integral durante el pasado verano. Las jornadas de puertas abiertas celebradas el miércoles y ayer sirvieron también para que los progenitores de los estudiantes procedentes del clausurado colegio de Roo vieran el nuevo centro educativo en el que han sido integrados sus hijos.

Profesores del CEIP de A Serra acompañaron a grupos de padres en la visita y les fueron informando no solo de las obras realizadas -que alcanzaron una inversión de más de medio millón de euros-, sino también de las características y métodos docentes, de las posibilidades de formación, de las unidades educativas generales y específicas y de las actividades que se han programado para el presente curso.Futuras peticiones

El director del colegio, David Valín Arias, se puso al frente, durante las dos jornadas, del primer grupo que visitó el colegio. En rondas de unas veinte personas, mayoritariamente madres de alumnos, fueron siguiendo las explicaciones del maestro, preguntando por aspectos del centro y sugiriendo diversas modificaciones y mejoras que aún pueden realizarse. David Valín explicó que algunas de las propuestas pueden solucionarse con la intervención del Concello y otras ya dependen de la propia Consellería de Educación.

Así, ante la petición de unas madres de formular solicitudes por escrito para solucionar deficiencias, indicó que «co Concello non solemos ter problemas. Cando precisamos algo, chega cunha chamada de teléfono. Se xorden anomalías ou non nos atenderan, si fariamos a reclamación precisa por escrito», señaló.

Al finalizar la visita al centro con el director del colegio, un grupo de madres quiso hacer públicas sus principales preocupaciones y reivindicaciones, que según señalaron ya formularan al responsable educativo.

 Transporte escolar

Entre dichas demandas figura el problema que afecta a los niños en el desplazamiento desde la parada final del transporte escolar hasta el colegio, especialmente los días de lluvia, el estado de los patios y zonas de juego, el que aún no se instalaran todos los medios educativos en las aulas, en especial los audiovisuales, y el excesivo tiempo que los niños pasan fuera de sus domicilios, unas ocho horas diarias, según afirmaron.

No trascendió ninguna objeción al cierre del colegio de Roo, aunque padres del Navasqüés significaron: «Temos que adaptarnos ao cambio» Los progenitores cuyos hijos estudiaban en dicha escuela indicaron que «alí estabamos moi a gusto e o peche colleunos por sorpresa, debéramos de estar avisados e así poder programarnos para este cambio».