La última oportunidad para llevarse el aprobado a casa

antón parada RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

Los centros educativos de la zona iniciaron ayer los exámenes de recuperación que finalizarán el martes

02 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque todavía faltan cerca de dos semanas para que el sonido del timbre despierte de su letargo estival y vuelva a llamar a las aulas a los estudiantes de secundaria, ayer no era difícil ver a pequeños grupos de jóvenes nerviosos agolpados frente a las puertas de institutos y sujetando manojos de apuntes como un creyente se aferra al rosario. Se trata de aquellos alumnos que se han pasado el verano estudiando para aprobar alguna de las materias que tienen pendientes.

«Pois quedáronme latín de primeiro e de segundo de bacharelato, ah, e inglés», explica la ribeirense Laura Rey de sus últimos obstáculos para obtener el graduado en bachiller. Su verano no ha sido el mejor de su vida, pero si cae un texto César en la traducción nada le impedirá matricularse en estética.

A la joven le acompaña su amigo Serafín Abuín, en su caso lleva varios años arrastrando la asignatura de biología, algo que no le impidió seguir trabajando en la descarga de pescado, llevándose los apuntes para estudiar en las horas libres entre barco y barco. «Quero facer o ciclo de Automoción ou Máquinas, pero a estas alturas xa non quedan prazas libres así que me pasarei outro ano traballando», reconoce.

Dinámica habitual

En la ribeirense praza dos Estudantes una chica del IES Número Un conversa animada con una compañera que le apoya antes del examen. «Me costó mucho adaptarme al instituto», comenta Laura Parada, que empezó el bachiller en este instituto tras llegar de otro centro. Nunca fue una chica de suspensos, pero ahora en el carro de septiembre lleva inglés, lengua y matemáticas aplicadas, por eso «me he pasado el verano en clases particulares, dos horas de mañana y dos de tarde». Antes de despedirse cruza los dedos y reza porque el enunciado de la pregunta de literatura verse Quevedo.

«¡No se me ha presentado ninguno de adultos!, muchos trabajan o tienen que cuidar de la familia», explica el profesor de matemáticas Víctor García. A su lado, su compañero en el Número Un y docente de Lingua Galega explica que no vale la excusa de determinados temas que se atragantan, como las cantigas medievales. «A clave para aprobar é poñerlle gañas. O profesorado e o sistema é flexible se os rapaces fallan en temas determinados», diagnostica Fran Cabana, para destacar que las cifras de suspensos de este año son las usuales a otros cursos y que no cree que acudir una pasantía marque la diferencia entre aprobar o no.

Cerca de 30 jóvenes repetirán la ABAU

Un total de 32 estudiantes de la zona regresarán a Santiago para intentar lograr el aprobado en la ABAU que no obtuvieron en junio, cifra similar a la de cursos pasados. La importancia de pasar esta prueba será vital porque sino tendrán que esperar un año sin poder matricularse en una carrera.