Los socios de la entidad deben dar luz verde a los trabajos para excavar y consolidar el templo de San Tomé
16 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Uno de los caballos de batalla de la directiva de la comunidad de montes de Baroña es la puesta en valor y divulgación del rico patrimonio que se conserva en su territorio, y en el marco de las iniciativas emprendidas en este sentido se enmarca la recuperación de dos antiguas capillas. Ya se han realizado una serie de trabajos de limpieza en el entorno y el siguiente paso será la excavación y consolidación del templo de San Tomé.
Para que este proyecto salga adelante, es preciso que los comuneros den el visto bueno a la inversión necesaria. De hecho, esta actuación es uno de los asuntos que se tratarán en una asamblea extraordinaria que se celebrará el domingo. La capilla de San Tomé está cerca de la aldea de Montemuíño y de ella se conservan algunos restos de los muros, aunque faltan muchas piedras que los vecinos fueron extrayendo después de que, al parecer, una fuerte riada destruyese el templo. De hecho, un sarcófago hallado en la zona lleva décadas en una propiedad privada.
Además, aunque habrá que esperar a las excavaciones, arqueólogos consultados por los comuneros creen que podría tratarse de una capilla precristiana que luego se dedicó al culto católico.
Sendero listo
El templo de San Tomé está a apenas a unos metros de un conjunto de molinos que también se han puesto en valor en las últimas semanas. Se ha llevado a cabo la limpieza de la maleza y se ha habilitado un sendero que próximamente se señalizará.
En cuanto a la otra capilla que quiere divulgar la comunidad de montes, es la de San Xoán, desconocida incluso para los vecinos y de la que no se conservan restos que se aprecien a simple vista.